Política y Economía

El peronismo no oficialista bonaerense se organiza de cara a las elecciones


Guillermo Moreno, Graciela Camaño y hasta Hilda Chiche Duhalde son los nombres que buscan competir

Un conjunto de dirigentes peronistas no alineados en el Frente de Todos comenzó a organizarse para competir en las próximas elecciones y confía en que tendrá buenos resultados en la Provincia de Buenos Aires, territorio en el que crece el descontento con el Gobierno nacional.

Entre los que no están conformes con el rumbo del oficialismo y pretenden competir electoralmente en las próximas elecciones están el ex secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno; la ex massista Graciela Camaño y hasta Hilda Chiche Duhalde.

Aunque aún no definió si competirá o no, fuentes consultadas por la agencia Noticias Argentinas aseguran que también Florencio Randazzo se encuentra organizando un armado electoral y mantiene diálogo con varios de los dirigentes que lo supieron acompañar cuando compitió en 2017 para luego dar un paso al costado de la política.

Desde el peronismo no oficialista remarcan que las encuestas que hoy en día miden en la provincia de Buenos Aires dan como primera opción en intención de voto a la ex gobernadora María Eugenia Vidal y consideran que el oficialismo está acumulando un importante rechazo que lo puede llevar a quedar tercero.

Además, señalan que esas encuestas fueron realizados antes del escándalo del «vacunatorio VIP» que montó el ex ministro de Salud, Ginés González García, y cuyas repercusiones en el descontento de la gente aún no fue analizado.

Lo cierto es que encuestas previas al escándalo que sacudió y aún sacude al oficialismo muestran que crece día a día la imagen negativa del presidente Alberto Fernández, que tras la suba inicial al principio de la pandemia de coronavirus comenzó a perder popularidad en el electorado.

Tal es el caso del último estudio de la Consultora Giacobbe y Asociados, que comparó la imagen de distintos dirigentes nacionales entre el 11 y el 13 de febrero, días antes de que estallara el escándalo ya mencionado.

En ese estudio la imagen negativa de Alberto Fernández alcanzó el 55%, mientras que la positiva es apenas de un 26%.

La consultora señaló que «Alberto Fernández sigue exhibiendo el desgaste equivalente a tres años de gestión, es decir, que su deterioro de imagen es más acelerado que lo esperable».

En ese sentido, agregaron que «el Presidente perdió, desde mediados de diciembre, tres puntos de imagen positiva que se depositaron directamente en su negativa».

Ante estos sondeos, que en Olivos se analizan día a día, el oficialismo está trabajando en varias herramientas de ingeniería electoral que van desde postergar las elecciones hasta suspender las Paso.

En el peronismo no oficialista señalan que la imagen de Fernández no va a volver a subir porque el presidente «no tiene forma de mejorar la situación económica de la sociedad».

«Alberto Fernández va a salir tercero en la Provincia de Buenos Aires. Máximo Kirchner quiere ir al PJ bonaerense para cuidarse de la derrota que va a sufrir el oficialismo, no porque crea que es un trampolín hacia la presidencia», aseguró Guillermo Moreno en declaraciones radiales.

Además de la provincia de Buenos Aires, el peronismo busca motivar a dirigentes heridos por el Frente de Todos para canalizar votos en otros distritos y también desarrolla diálogos con la Sociedad Rural y distintos empresarios que ven el deterioro de la economía y la poca proactividad oficialista.

Por este motivo, la gran incógnita que aparece estos días es qué va a hacer el ex candidato a vicepresidente Miguel Ángel Pichetto, que fue tentado por el peronismo no oficialista para encabezar la lista en la Ciudad de Buenos Aires y que acaba de lanzar un sello propio.

Para ocupar ese lugar, el ex senador deberá competir en la capital del país contra Juntos por el Cambio, que posiblemente llevará como candidata, entre otros, a la ex ministra de Seguridad Patricia Bullrich.