Por Diego Mussetta
Como aquél sábado de 2017. Cuando comenzó a edificar una temporada que lo erigió finalmente en el campeón. Así, a lo campeón. Contundente, demoledor y mostrando la chapa, Facundo Ardusso se quedó con la victoria en la primera final que el Súper TC2000 disputó en el Autódromo de Rosario.
Ni la lluvia pudo frenar al Renault Fluence N° 1. Ya había insinuado en la prueba de clasificación que tenía el auto para pelear la pole. Esa que tenía en el bolsillo pero que finalmente Agustín Canapino le birló en el instante final. Pero cuando la bandera verde habilitó la pura velocidad, allí el de Las Parejas mostró las garras. Apretó al de Arrecifes en un par de oportunidades y en el segundo giro ya se adueñó del primer lugar, una ubicación que no abandonó hasta recibir la esperada bandera a cuadros.
El Flaco Ardusso tenía el auto. Es que fue demoledor con el Fluence. Vuelta a vuelta se le escapaba a Canapino primero y a Rossi después. Hasta que a mitad de carrera un despiste de Spataro en la entrada a la recta principal generó el ingreso del Auto de Seguridad. Todo a cero. Sin diferencias. Y una nueva carrera en marcha…
Poco le importó a Ardusso el parate. Aceleró en la reanudación y más allá de que Rossi se le acercó en las últimas vueltas, se veía que el parejense tenía el auto del sábado.
El segundo lugar del podio fue para Rossi, de gran carrera y de gran maniobra cuando pasó a Canapino. Tercero llegó Mariano Werner, demostrando que el Peugeot 408 tiene potencial. El cuarto lugar quedó en manos de Facundo Chapur con Citroen, quinto Canapino con Chevrolet y sexto el de Capitán Bermúdez Fabián Yannantuoni (Peugeot 408).
Este domingo, desde las 12.10, se largará la segunda final. Antes, a las 9.15, será el turno de la clasificación. “¿Quién gana sábado y domingo?”, le preguntaron en la conferencia del martes a Ardusso. Y el Flaco, sin rodeos, no dudó: “Ardusso por dos”. Cumplió ya con la primera. ¿Repetirá este domingo?