Dos personas que se encontraban hospitalizadas fallecieron hoy, por lo que asciende a 22 la lista de víctimas fatales del accidente ocurrido ayer en la estación central ferroviaria de El Cairo, Egipto, informó el Ministerio de Salud de este país.
El anuncio del fallecimiento de las dos personas, un miembro de los equipos de emergencia y otra cuya identidad se desconoce de momento, fue realizado por la ministra egipcia de Sanidad, Hala Zayed, a través de la agencia oficial de noticias egipcia, MENA.
Zayed visitó hoy el hospital Dar al Shifaa de El Cairo para hacer seguimiento del estado en el que se encuentran los heridos, informó la agencia Efe.
Además de las 22 víctimas fatales ayer resultaron heridas unas 41 personas, después de que una locomotora se estrellara contra un tope de final de vía en la estación de Ramsés, lo que causó una explosión y un gran incendio.
La Fiscalía General de Egipto reveló ayer que, según las investigaciones preliminares, el accidente se debió a una negligencia del conductor, que abandonó el vehículo sin accionar los frenos tras sufrir un percance con otro tren.
La locomotora sin conductor cogió velocidad y acabó chocando contra una barrera de hormigón situada al final de la vía del tren, donde se situaban los pasajeros en los andenes, que fueron embestidos y afectados por la consiguiente explosión y fuego.
Los cuerpos de los fallecidos están calcinados por lo que se están obteniendo muestras de ADN para poder identificarlos.
El ministro de Transporte, Hisham Arafat, presentó su renuncia poco después del accidente y fue reemplazado de forma temporal por el ministro de Electricidad, Mohamed Shaker.
La mayor tragedia ferroviaria de la historia de Egipto, en la que murieron 376 personas, ocurrió en 2002 al incendiarse un tren que cubría el trayecto entre El Cairo y la ciudad monumental de Luxor, en el sur del país.