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Eduardo Martín: “Celebrar la resurrección de Cristo, es celebrar la esperanza del hombre”


“La Pascua es la celebración más importante de la vida de la Iglesia, y también para el mundo entero. Porque celebrar la Resurrección de Cristo, es celebrar la esperanza para el Hombre”, dijo el arzobispo Eduardo Martín, a Con la Gente, a días de realizarse una de las fiestas centrales que identifican al cristianismo.

“Es celebrar que la muerte no es la última palabra, que la última palabra para la vida del Hombre y para la historia de toda la humanidad es la Resurrección. Es la esperanza de los límites que el Hombre por sí solo no puede cambiar: el perdón del mal, el pecado, y la liberación de la muerte”, explicó.

Sin embargo, ante el progresivo proceso de debilitamiento y de “secularización” que sufre la Iglesia Católica en los últimos tiempos, y por consiguiente, de las tradiciones cristianas que implica, el arzobispo señaló que un gran desafío “es volver otra vez a lo esencial, al origen”.

En tal sentido, hizo alusión al debate por la despenalización y el derecho al aborto que tomará lugar el próximo martes en el recinto del Congreso de la Nación, “ese es otro de los signos de un debilitamiento de la conciencia humana que cree poder solucionar un drama eliminando a uno de los actores”, señaló.

“Las leyes tienen que favorecer la vida, tienen que ayudar y contener a las personas que se encuentran en situación de fragilidad, para esa vida, que ya está y que es distinta que la de la madre”, agregó respecto a la problemática.

En ese orden, manifestó: “Aceptar que el aborto sea un derecho, o que sea algo justo, es un retroceso en la civilización. Esperemos que nuestros diputados y senadores tengan la luz suficiente y la inteligencia para favorecer la vida”.

Por otro lado, también hizo referencia al contexto socio político que atraviesa el país. “La realidad sigue siendo dura. Esto es un problema estructural de la Argentina que no se ha resuelto en los últimos 30 años de democracia. Yo creo que lo más razonable es que el Gobierno y la oposición se sienten y busquen soluciones concretas”, declaró.

Y manifestó como dos cuestiones fundamentales, “la educación accesible a todos, y el trabajo digno para todos”, como las respuestas para que una persona pueda “ser protagonista de su propio destino”.

Para finalizar, el arzobispo brindó unas palabras a la sociedad para reflexionar en estas Pascuas, “Ábranle el corazón a Cristo que quiere pasar por sus vidas”. “Tener esperanza, que si Cristo ha resucitado, no nos tenemos que dejar robar esa esperanza, y esa alegría que Cristo nos da”, concluyó.