La Justicia de Rosario dictó este viernes la prisión preventiva como jefe de una asociación ilícita al hermano de Esteban Alvarado, un presunto narco local detenido por el homicidio de un prestamista, informaron fuentes judiciales.
Se trata de Gustavo «Tuerto» Ramos, quien se entregó el jueves por la tarde en la sede de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE), ya que contaba con un pedido de captura desde principios de este mes por ser sospechoso de formar parte de una banda integrada por al menos otros seis civiles y cuatro policías santafesinos.
Ramos es hermano de Esteban Lindor Alvarado (44), un hombre que cumplió condena por el robo de autos en el Gran Buenos Aires que eran desarmados en Rosario, y está preso acusado de ser el instigador del homicidio del prestamista Lucio Maldonado, asesinado en noviembre pasado.
Este mediodía, en el Centro de Justicia Penal de Rosario, los titulares de la Unidad Fiscal de Gravedad Institucional acusaron a Ramos de ser integrante y organizador de una asociación ilícita cuya jefatura le fue imputada a Alvarado. La jueza María Melania Carrara aceptó el planteo de la Fiscalía y le dictó al acusado la prisión preventiva efectiva por el plazo de ley.
Ramos fue imputado por haber liderado la organización ilícita «disponiendo desde de la administración de recursos materiales y humanos con fines delictivos», después de que su hermano cayera detenido en un camping de Córdoba el 2 de febrero pasado, indicaron las fuentes.
Los fiscales afirmaron que «la asociación repartía sus tareas entre personas que conforman tres estamentos diferenciados, el primero de ellos integrado por quienes procuraban los medios materiales para la comisión de crímenes violentos y ejecutaban delitos contra la propiedad y contra las personas para obtener algún tipo de beneficio para la empresa criminal».
«El segundo de los estamentos está constituido por un grupo de personas que en cumplimiento de las órdenes de Ramos llevaban a cabo hechos ilícitos y delictivos tendientes a dotar de impunidad a los crímenes violentos ejecutados por los integrantes de la organización», señalaron.
Entre las tareas realizadas por la organización, los investigadores indicaron que se encuentra la de «brindar información falsa a los investigadores del Ministerio Público de la Acusación (MPA), aportar información reservada de las investigaciones en curso al jefe de la organización, omitir llevar a cabo tareas propias de su función en relación a la localización y detención de Alvarado y simular operativos policiales para incorporar información falsa a las investigaciones».
Un tercer estamento estaba integrado por un grupo de personas que bajo las directivas de Ramos, se encargaban de gestionar un entramado de empresas comerciales y unipersonales que le permitían ocultarse tras el amparo que brindan las estructuras societarias.
Esas empresas eran TOIA SRL; EDRA SRL; Logística Santino SRL; Logística TSC SRL y Sagrado Corazón de María SRL., revelaron los fiscales del MPA. «A través de ellas se proveía de bienes muebles, inmuebles y servicios a toda la estructura criminal como dinero para pagar informantes y sicarios, departamentos y casas para alojarse, y autos para moverse», concluyeron.