Fueron aprehendidos luego de que se contradijeran en numerosas oportunidades en sus declaraciones
Dos jóvenes fueron detenidos en la ciudad de Paraná como sospechosos de haber participado del triple crimen cometido a mediados de noviembre en el barrio Los Paraísos, en el sureste de la capital entrerriana, y que se sospecha que estuvo vinculado al narcotráfico, informaron fuentes policiales.
Tras el análisis de diferentes pruebas fílmicas y testimonios, el fiscal de Paraná Martín Wasinger solicitó que se realicen dos allanamientos, en los que fueron detenidos un joven de 18 años y otro de 22. Los operativos se desarrollaron en dos domicilios ubicados en la calle Recuerdo de Provincia al 1700 y en avenida Almafuerte al 2.000. En el lugar se secuestraron celulares y elementos de interés para la causa.
Los jóvenes fueron detenidos luego de que se contradijeran en numerosas oportunidades respecto de dónde estuvieron el día del hecho y si tenían relación con la motocicleta usada por los atacantes.
El pasado domingo 15 de noviembre, cerca de las 15, Cristian Barreto (43), su hermano Víctor, Laureano Morales (20) y Germán Herlein (32) se encontraban reunidos en una vivienda ubicada en Las Camelias, entre Ovidio Lagos y Mihura, de la capital entrerriana y cuando salieron a la calle fueron atacados a balazos por dos personas que se trasladaban en motocicleta y llevaban puestos cascos.
El hombre que efectuó los más de 20 disparos descendió de la moto e intentó correr a Víctor Barreto, quien alcanzó a cruzar la calle y se ocultó cuerpo a tierra en un baldío con pastizales, aunque luego regresó y acribilló a los otros tres, que murieron en el lugar casi en el acto debido a múltiples tiros, varios de ellos en la cabeza.
Si bien los voceros aseguraron a Télam que «no se descarta ninguna hipótesis», la principal sospecha apunta a un posible ataque «por encargo» vinculado al narcotráfico.
En 2018, Herlein acordó una pena de seis años de prisión efectiva en un juicio abreviado en el que fue hallado culpable de liderar una banda de distribución y venta de drogas en cuatro zonas de Paraná, no obstante permanecía en libertad desde diciembre pasado.
El resto de las víctimas eran investigadas por sus vínculos y negocios con el narcotráfico en Entre Ríos y Santa Fe, añadieron los informantes. El fiscal aguarda las pericias sobre los teléfonos celulares de los fallecidos y de ambos detenidos; y el resto de resultados de los análisis científicos a los cuerpos y a elementos recolectados en el lugar.
Los pesquisas procuraban determinar el motivo por el que los cuatro hombres estaban reunidos en esa casa, si hubo conversaciones previas que indicaran que estaban en peligro y cuántas personas participaron de la logística del triple crimen. Por otro lado, intentan determinar si existe una relación entre el hecho y un automóvil robado en Rosario días atrás y que fue quemado horas después del crimen.
Se trata de un Renault Kwid robado en Granadero Baigorria a fines de octubre, que ingresó el 5 de noviembre a Paraná por el túnel subfluvial y que el día del triple crimen, el 15 de ese mes, fue prendido fuego, por lo que se investiga si fue usado como apoyo de los asesinos.