El gobierno de Venecia multó a dos turistas de República Checa por nadar en un canal cerca de la plaza San Marcos. Según informó Il Gazzettino, los visitantes deberán pagar unos 3.000 euros cada uno por «alterar el orden público».
Una patrulla acuática de los Carabinieri de Italia (la fuerza que cumple las funciones policíacas) fue alertada por los gritos de la gente, entonces se acercó hasta el lugar. Al llegar, observaron a dos hombres en el agua y pensaron que se habían caído accidentalmente.
Poco después, pudieron comprobar que eran hinchas del Slavia Praga y estaban en el país para asistir al partido de su equipo con el Inter de Milán. Los hombres estaban totalmente desnudos y, de acuerdo al relato de los agentes, hacían bromas y trataban de llamar la atención de las personas que pasaban.
Los turistas señalaron que decidieron bañarse en el canal porque era «una tarde particularmente cálida». Los jóvenes fueron subidos al bote policial y les ordenaron que se vistieran. Luego, fueron trasladados a la comisaría y se les aplicó la multa.
En Venecia, este tipo de incidentes a comenzado a tener cierta periodicidad por lo que las autoridades comenzaron a implementar medidas más estrictas. En mayo se aprobó una ley que prohíbe los picnics en algunas zonas, bañarse en fuentes y estar sin remera en espacios públicos.