El riesgo de contraer coronavirus era el argumento en el que se basaba el pedido de Hugo Bermúdez, condenado a perpetua por el caso
El Tribunal Oral Criminal (TOC) 3 de Morón rechazó este lunes un pedido de arresto domiciliario basado en el riesgo de contraer coronavirus realizado por Hugo Bermúdez, uno de los condenados a prisión perpetua por el secuestro y crimen de la niña Candela Sol Rodríguez, cometido en 2011 en el partido bonaerense de Hurlingham.
En un fallo emitido hoy, al que Télam tuvo acceso, los jueces Diego Bonanno y Mariela Moralejo Rivera, rechazaron otorgarle ese beneficio a Bermúdez, a quien condenaron en septiembre de 2017 a la pena máxima de prisión por considerarlo, junto al también condenado Leonardo Jara, coautor del delito de privación ilegal de la libertad coactiva seguida de muerte.
Días atrás, basado en los problemas de salud que padece y por encontrarse en el grupo de riesgo de contraer coronavirus, Bermúdez pidió poder cumplir la pena en su domicilio, monitoreado por un dispositivo electrónico.
El defensor oficial Rodolfo Jorge aseguró que su asistido «se encuentra comprendido, de conformidad con los criterios epidemiológicos vigentes» y detalló mediante un informe médico las razones de salud que fundamentaban el pedido en favor del condenado, quien se encuentra alojado en la Unidad Penal 25 de Lisandro Olmos.
Según costa en el fallo del TOC 3, la defensa argumentó que Bemúdez debe «considerarse población en mayor riesgo ante el COVID-19, en atención a tener a la fecha mas de sesenta y cinco años de edad; como así también registrar antecedentes de padecimiento de H.T.A (hipertensión arterial)».
El planteo fue rechazado por el fiscal Pablo Galarza, quien refirió que «la medida de coerción que hoy pesa sobre el imputado resulta la mas idónea para asegurar los fines del proceso y frustrar el peligro de fuga» y además destacó «la inexistencia de casos de Covid 19» en el penal donde Bermúdez está alojado.
Al rechazar el planteo, el TOC expresó que «en la unidad donde se aloja (Bermúdez) se han tomado las medidas protocolares relacionadas a la prevención y contención de la enfermedad, y las mismas se ajustan al protocolo de contingencia emanado por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos».
También destacó que en ese penal «no cuentan con casos positivos para Covid-19» y que la salud de Bermúdez y su edad «no importan una situación de riesgo cierta».
«El fundamento de la Defensa no resulta suficiente para desvirtuar los argumentos que me llevan a concluir por el rechazo del instituto como lo hiciera oportunamente, encontrándonos ante una de las imputaciones más graves de la norma penal», resolvieron los jueces.
Bermúdez y Jara fueron condenados el 20 de septiembre del 2017 y para los jueces ambos llevaron a cabo el secuestro y crimen en el marco de un «ajuste de cuentas contra el padre» de la niña «por algún ilícito que este cometiera -vale recordar que cumplía por entonces condena por pirata del asfalto-«.
Candela fue secuestrada el 22 de agosto de 2011 y su cuerpo fue hallado días después, el 30, en el interior de una bolsa de consorcio abandonada a un costado de la colectora de la Autopista del Oeste.