El fabricante británico de medicamentos AstraZeneca aseguró que la vacuna antiCovid-19 que desarrolla la Universidad de Oxford produce una respuesta inmune tanto en ancianos como en jóvenes
Luego de las dudas generadas tras la suspensión de los ensayos un mes atrás debido a la reacción adversa detectada en uno de los voluntarios, y tras la muerte de un paciente en Brasil que participaba de las pruebas, hoy el fabricante británico de medicamentos AstraZeneca aseguró que la vacuna antiCovid-19 que desarrolla la Universidad de Oxford produce una respuesta inmune tanto en ancianos como en jóvenes.
Según publica hoy el diario Financial Times, la vacuna mostró una respuesta inmunológica sólida en personas mayores, el grupo de edad de mayor riesgo, y también reacciones adversas menores.
Los resultados de los análisis de inmunogenicidad en la sangre realizados a personas de la tercera edad coinciden con datos publicados en julio en los que se mostraba que la vacuna generaba «respuestas inmunológicas sólidas» en un grupo de adultos sanos de entre 18 y 55 años.
«Es alentador ver que las respuestas fueron similares entre los adultos mayores y los más jóvenes y que la reactogenicidad -la propiedad de una vacuna de ser capaz de producir reacciones adversas comunes- fue menor en los adultos mayores, donde la gravedad de la enfermedad Covid-19 es mayor», indicó un portavoz de AstraZeneca.
«Los resultados reúnen un conjunto de pruebas que demuestran la seguridad e inmunogenicidad del AZD1222», agregó.
AstraZeneca, que realiza la vacuna con investigadores de la Universidad de Oxford, se encuentra entre las empresas en primera línea de la carrera para producir una vacuna que proteja contra el coronavirus, que ya que causó la muerte a más de 1,15 millones de personas y devastó la economía de todo el mundo.
Si bien los resultados aún no son concluyentes como para comenzar con la producción en masa y la repartición, el secretario de Estado para la Salud de Reino Unido, Matt Hancock, dijo que la administración está preparando la logística para un posible despliegue que espera que ocurra en la primera mitad de 2021.
Las pruebas de esta vacuna fueron suspendidas en todo el mundo a inicios de mes pasado debido a que un voluntario en un estudio británico enfermó. Los ensayos clínicos sin embargo ya se reactivaron en varios países y la farmacéutica británica dijo que la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos le dio la luz verde el viernes para su reanudación en el país.
Las suspensiones temporales de pruebas de medicamentos son comunes, porque en estudios que incluyen a miles de participantes es muy probable que algunos se enfermen. Parar unas pruebas les permite a los científicos determinar si la enfermedad es un efecto secundario o una coincidencia.
Los ensayos clínicos fueron pausados luego de que un participante en Gran Bretaña sufriera síntomas neurológicos severos correspondientes a una rara inflamación de la médula espinal llamada mielitis transversa. Fue la segunda suspensión de las pruebas.