El juicio concluyó esta semana en los tribunales de la capital provincial. El sujeto cometió delitos contra la integridad sexual de la menor, desde pequeña y hasta su adolescencia
Un hombre de 31 años, identificado como Jorge Bautista Ledesma, fue condenado a 13 años de prisión como autor de delitos contra la integridad sexual de la hija de su pareja en la ciudad de Santa Fe. La pena fue impuesta por unanimidad por el tribunal integrado por los jueces José Luis García Troiano, Pablo Busaniche y Héctor Gabriel Candioti en el marco de un juicio oral, que tuvo lugar en la capital provincial.
Los magistrados condenaron a Ledesma como autor de los delitos de abuso sexual con acceso carnal calificado (por la guarda y por la convivencia preexistente con una menor de 18 años) y promoción a la corrupción de menores calificada (por la guarda, por la convivencia y por ser cometida contra una menor de 13 años).
La fiscal que investigó los ilícitos es María Celeste Minniti, quien también representó al MPA en el juicio junto con el fiscal Matías Broggi.
“Aguardaremos los fundamentos del tribunal para analizar los motivos por los cuales resolvieron tal como lo hicieron”, aclaró Minniti. “No obstante, estamos conformes porque el veredicto fue por unanimidad y por la misma calificación penal que planteamos en la acusación y en nuestros alegatos”, subrayó la fiscal.
En relación al monto de la pena, Minniti dijo que “si bien habíamos solicitado una pena de 15 años, lo resuelto por los magistrados es razonable y se ajusta a la escala determinada por el Código Penal”.
La fiscal también remarcó que “todos los testigos que declararon, fundamentalmente las psicólogas que brindaron atención profesional a la víctima, coincidieron en que para ella era fundamental la imposición de una condena como parte de su proceso de reparación por los sometimientos que padeció”.
“La víctima es la hija de la mujer que aún hoy continúa siendo la pareja de Ledesma”, informó la fiscal al referirse a los hechos ilícitos. “De hecho, la investigación se inició a raíz de una denuncia que hicieron la abuela y una tía maternas de la víctima porque no podían tener contacto con la niña. A raíz de esa denuncia intervino el servicio de Niñez de la municipalidad de Santa Fe, y la niña pudo contar lo ocurrido a las profesionales de ese equipo”.
“En el debate oral pudimos probar que la niña comenzó a sufrir los ataques sexuales cuando era muy pequeña y continuó padeciéndolos hasta su adolescencia”, destacó la fiscal. En tal sentido, precisó que “los abusos fueron cometidos en reiteradas oportunidades y durante un período prolongado”.
Minniti sostuvo que “Ledesma aprovechó la situación de convivencia con la víctima para cometer los ataques sexuales e incluso amenazó a la niña con matar a su madre si contaba algo de lo sucedido”.
Al respecto, la funcionaria del MPA también argumentó que “estos actos generaron en la víctima un proceso de iniciación sexual suficiente para afectar su libertad, más si se tiene en cuenta que la niña consideraba a Ledesma como a un padre, lo cual hace que estas agresiones sexuales tengan las características de un incesto”.