Con el objetivo de descentralizar y federalizar la política, la cámara alta debate el proyecto impulsado por Alberto Fernández
El Senado comienza a tratar este martes el proyecto de capitales alternas enviado por el presidente Alberto Fernández, con el que pretende avanzar con «políticas de descentralización y federalización». La iniciativa será puesta a discusión en un plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Presupuesto y Hacienda del Senado, previsto para las 17:30 en el Salón Arturo Illia de la Cámara Alta.
«Nuestro objetivo es descentralizar la Administración Pública Nacional y promover un Plan de Desarrollo con Equidad Territorial, mediante el cual se fortalecerán las estructuras económicas en las provincias con planificación y financiamiento para infraestructura productiva», había subrayado el mandatario al referirse al proyecto en su discurso del 1 de marzo en el Congreso.
En efecto, el proyecto establece que el Ministerio del Interior tendrá a cargo «la coordinación del proceso de evaluación y selección de los organismos y entidades del Sector Público Nacional» cuyas sedes centrales «serán relocalizadas o instaladas en territorio provincial».
Para ello deberán tenerse en cuenta, según manda la iniciativa, «las competencias específicas del organismo bajo análisis; las propuestas recibidas desde los Gobiernos y Legislaturas provinciales y municipales» y «el impacto potencial de la relocalización o instalación de la sede central o delegación del organismo, en las diferentes jurisdicciones».
El corazón del proyecto es la declaración de 24 ciudades propuestas por cada una de las provincias y la ciudad de Buenos Aires como «capitales alternas», al tiempo que crea el programa «Gabinete federal» destinado a «realizar reuniones de trabajo» entre autoridades nacionales y locales y representantes de organizaciones de la sociedad civil.
El texto establece que el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, convocará a esas reuniones de trabajo «con una periodicidad no mayor a los 30 días y considerará en forma prioritaria a las capitales alternas para definir el lugar de reunión».
Al enviar el proyecto al Congreso, a mediados de febrero pasado, el jefe de Estado había advertido sobre «la existencia de importantes desigualdades entre las regiones» del país y había remarcado la necesidad de «acercar el Gobierno nacional a las realidades de las diversas jurisdicciones, así como también impactar positivamente en las economías regionales».
En ese sentido, Fernández subrayó que la declaración de capitales alternas «no tendrá un mero alcance simbólico», sino que apunta a «un reposicionamiento de las ciudades elegidas en términos de su rol en la vida política y la gestión administrativa del país».
El listado de las capitales alternas está integrado por La Matanza y General Pueyrredón, en Buenos Aires; Tinogasta, en Catamarca; Presidencia Roque Sáenz Peña, en Chaco; Comodoro Rivadavia, en Chubut; Río Cuarto, en Córdoba; Goya, en Corrientes; Concordia, en Entre Ríos; General Pico, en La Pampa; Chilecito, en La Rioja; Guaymallén, en Mendoza; Oberá, en Misiones; Cutral Có, en Neuquén; Bariloche, en Río Negro; Orán, en Salta; Caucete, en San Juan; Caleta Olivia, en Santa Cruz; La Banda, en Santiago del Estero; Río Grande, en Tierra del Fuego; y Monteros, en Tucumán.
También se incluyen las ciudades de Rosario, San Luis, Formosa y San Pedro de Jujuy.