A dos semanas justas de su debut contra Francia en el Mundial de Japón, la selección argentina de rugby se dio un baño de confianza al golear este sábado en Sidney al equipo australiano Randwick (74-0), con una gran actuación de una de las grandes esperanzas de los Pumas, Bautista Delguy.
El joven wing de 22 años de los Jaguares, que regresaba a la selección argentina después de una larga lesión en una rodilla, y entró en el segundo tiempo, sumó cuatro de los doce tries ante el histórico club de la periferia de Sídney, fundado en 1882. Además de su festival anotador, los Pumas lograron mantener su ingoal a cero ante el equipo australiano.
El técnico Mario Ledesma, que había anunciado que la base del equipo que formaría contra Randwick lo haría también en el debut mundialista ante Francia, puso como titular en el puesto de apertura a Benjamín Urdapilleta, aunque en el segundo tiempo Nico Sánchez entró en lugar del jugador del Castres, dejando la duda de quién de los dos jugará de inicio ante los Bleus y manejará los hilos del equipo.
En el puesto de hooker, Ledesma puso a Julián Montoya, aunque en la segunda mitad, en los varios cambios que introdujo el técnico, entraría Agustín Creevy.