El sector químico en Rosario y la región ha sufrido un fuerte impacto negativo en este último tiempo con tres fábricas cerradas, una en Rosario, otra en Álvarez y la tercera ubicada en Venado Tuerto, que dejaron un saldo de casi 50 trabajadores en la calle.
En el caso puntual de Rosario, la agroquímica Couso Jorge, que empleaba a 14 trabajadores, bajó sus persianas.
Por otro lado, el caso más reciente es el de Meplabat, una productora de baterías de la ciudad de Venado Tuerto, que tenía 5 empleados.
A su vez, la empresa Free Colors, que fabricaba fuegos artificiales para la cadena Cienfuegos, cerró su planta en la localidad santafesina de Álvarez a mediados de agosto. Contaba con unos 28 operarios.
La firma nació a principios de los años 60 y llegó a tener una fábrica propia en un predio de 50 mil metros cuadrados, con tecnología de punto y bajo los más estrictos niveles de seguridad, a partir de la cual comenzó a expandirse y transformarse en unas de las referencias en materia de fabricación y comercialización de artículos de pirotecnia.
El secretario gremial del Sindicato Químico de Rosario, José Luis Coronel, dijo que “tenemos que dar esta triste noticia de que tres empresas tuvieron que cerrar por falta de trabajo y por la forma de gobernar que tiene el actual gobierno».
«Tenemos unos cuantos compañeros que se quedaron en la calle”, expresó Coronel, y agregó que el gremio esta “atento al pago que le corresponde a los trabajadores”.
“Las políticas económicas desarrolladas por el gobierno de Mauricio Macri asfixiaron el mercado interno y provocaron estos finales tan tristes para empresas que tuvieron plenitud de trabajo en otras épocas”, lamentaron desde el Sindicato Químico.