Por Enrique Genovar
La dirigencia de Central tiene muchos trabajos por estos días. Es que el armado del plantel que peleará por la permanencia la próxima temporada es una labor muy ardua. Por un lado el tema de los jugadores que se incorporarán y por el otro los futbolistas que el entrenador ya avisó que no tendrá en cuenta. Esto último llama la atención por la cantidad de profesionales que no tendrán lugar en el “nuevo Central de Cocca”; ya que según lo relevado en los últimos días la cifra asciende hasta cerca de los 16.
Pero lo que más llama la atención es que la mayoría de estos 16 fueron formados en la cantera auriazul.
¿Por qué sucede esto? ¿Qué es lo que pasó? Muchas cosas. Pero la primera lectura apunta directamente a una incorrecta política deportiva del club. Yerros que hoy hacen mella. Inversiones para formar a estos futbolistas que no tendrán nunca una retribución.
Hubo apuros. Errores en hacerles contrato por más tiempo de lo que el mundo del fútbol aconseja. Cambios de entrenadores con filosofías y formas de jugar muy distinta.
Nadie puede decir que “el corte” a estos jugadores esté mal. Es que la mayoría de ellos nunca rindieron y por la edad que tienen resulta difícil que puedan colaborar en lo que va a jugar el Canalla a partir de finales de julio. Pero sí, sin dudas esto debe servir como experiencia. Los directivos deben hacer cambios profundos en el último escalón que los chicos pisan entre inferiores y primera.