El secretario general de Luz y Fuerza, Alberto Botto, junto al Titular del Centro de Unión de Almaceneros, Juan Milito, participaron este viernes del segundo encuentro del seminario de «Economía Política» en el Complejo Cultural Atlas. Durante su disertación, Botto criticó fuertemente al gobierno de Mauricio Macri y mostró qué efecto tuvo la quita de subsidios por parte de Nación en el sector eléctrico.
El titular del Movimiento Sindical Rosarino presentó un informe realizado por el Observatorio de Datos que llevan adelante especialistas del Sindicato Luz y Fuerza junto al Grupo de Estudios Económicos de la Universidad Tecnológica Nacional.
En el mismo se informa cuál fue el impacto que tuvo la quita de subsidios del gobierno nacional en el precio mayorista de compra de energía. El gremialista expresó que las «tarifas condicionan mucho la vida de los argentinos», y comentó: “Durante los últimos tres años, el aumento en el sector residencial de mayor consumo aumentó desde $31 el mega vatio, a más de $2400. Es decir, ha experimentado un incremento de más del 6000%”.
“En el sector comercial e industrial, el incremento en el mismo periodo fue de más de 2500%”, agregó.
Para Botto, el aumento de tarifas y la quita de subsidios no es una mera casualidad. En ese sentido, el sindicalista manifestó: “El 10 diciembre de 2015, cambió el modelo económico del país y las decisiones que se toman tienen impacto en la economía y que son totalmente distinta a las anteriores” y aclaró que la decisión de subsidiar es una “decisión política”.
El dirigente mostró datos del Fondo Monetario Internacional que sostienen que el país que más subsidiaba en el año 2015 era Estados Unidos. “Claramente, los países más desarrollados del mundo son los que más subsidian”, resaltó.
A su vez, remarcó que Argentina subsidiaba aproximadamente unos 419 dólares per cápita por año mientras que el gobierno norteamericano tenía un subsidio de 2200.
Con lo que respecta a las ganancias, el titular del MSR mencionó que «los que están ganando son los generadores de energía, no las distribuidoras, y, casualmente, muchos de los generadores son cercanos al presidente”.
«En el período 2017 – 2018, disminuyó la demanda a nivel nacional de un 8,9%, equivalente al crecimiento de la demanda que tuvo hasta el año 2015. Eso marca que el principal impacto está dado por la industria porque no se está produciendo», detalló.
Por otra parte, el sindicalista defendió la «política económica y energética del gobierno anterior» ya que, según señaló, el gobierno kirchnerista aumento el 51% de la capacidad de generación y «fue uno de los que mas invirtió en el sector eléctrico».
En ese sentido, indicó que «durante 2003 y el 2015 se hicieron unos 5100 kilómetros de línea de alta tensión. Se logró anillar prácticamente todo el país». Además destacó las centrales de Atucha y el programa «energía plus».
Con datos de la comisión Nacional de Energía Atómica, sostuvo que «en 2015, el presupuesto que tenían las centrales atómicas fue de más de 363 millones de dolares, en el 2019, 161 millones de dólares. La caída es estrepitosa».
Botto comentó que las medidas tomadas por el gobierno de Mauricio Macri no lo sorprendieron y reconoció que lo único que no pudieron evaluar fue «con la velocidad que iban a ponerlas en marcha».
Finalmente, hizo referencia a los que definen de incapaces o torpes al gobierno: «Yo creo que no, estoy convencido que los objetivos que se propusieron fueron exitosos. Vinieron a hacer lo que hicieron, vinieron a empobrecernos, a destruir la industria”, dijo, y concluyó: «En tratarlos de improvisados, nos equivocamos nosotros».