Tras las críticas, el presidente de Brasil dio marcha atrás con el decreto que permitía la flexibilización laboral durante la pandemia
Tras las fuertes críticas, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, anunció este lunes mediante sus redes sociales que quedó sin efecto el artículo de su decreto sobre flexibilización laboral emitido durante la pandemia del coronavirus. Previamente, el mandatario había autorizado a las empresas dejar de pagar cuatro meses de salarios.
El presidente de Brasil había afirmado que «los empleos están siendo exterminados» con la pandemia del coronavirus, al justificar el decreto. «Es mejor que ser despedido», argumentó.
Lo hizo, irritado, al comentar a periodistas la encuesta de Datafolha aparecida hoy en la cual aparece el presidente con una popularidad por debajo de los gobernadores y su ministro de Salud, Luiz Mandetta, a raíz de cómo enfrentan la crisis del Covid-19.
«Preguntarme sobre una encuesta hoy es antipatriótico, infame, si no les gusta váyanse. No se puede entrar en pánico, estamos haciendo todo lo posible porque el pánico es más grave que la enfermedad. No tenemos cómo evitar los efectos del coronavirus», afirmó Bolsonaro esta mañana a la salida del Palacio de la Alvorada.
Bolsonaro es aprobado en esta crisis por el 36% de la población, el ministro de Salud, Luiz Mandetta, tiene el 55 por ciento, y los gobernadores en general un 54 por ciento, siendo que ninguno baja del 51%.
«Me importa un bledo que el ministro tenga mayor popularidad, eso no es una pregunta a la altura del riesgo de Brasil. Algunas autoridades están dando remedio en exceso», dijo Bolsonaro a los periodistas, contra las medidas de los jefes estaduales, que se han convertido, sin excepción, en los dueños de la iniciativa contra el coronavirus.