Preocupa al interior del recinto el comportamiento de algunos dirigentes republicanos, mientras en la calle se manifiestan seguidores de Trump
El Congreso de Estados Unidos certificará hoy los votos del Colegio Electoral que declararon a Joe Biden como el próximo presidente, en un clima de mucha tensión adentro del recinto por lo que será el comportamiento de algunos dirigentes republicanos, sobre todo el vicepresidente Mike Pence, y en la calle con una protesta de seguidores del mandatario saliente, Donald Trump.
El vicepresidente presidirá la sesión conjunta de las dos Cámaras, en la que los legisladores contarán y confirmarán estado por estado los votos del Colegio Electoral, el órgano que elige formalmente al inquilino de la Casa Blanca.
Esa certificación suele ser una formalidad, pero Trump, que insiste con el «fraude» sin presentar pruebas creíbles para la Justicia, estuvo presionando a Pence para que anule la victoria de Biden, al afirmar falsamente que tiene la autoridad para descartar los votos a favor del demócrata.
En el centro de Washington miles de seguidores de Trump se reunían como demostración de fuerza y en apoyo a sus denuncias de fraude electoral.
Sin respetar las consignas sanitarias, partidarios del presidente republicano llegados de todo el país se aglomeraban sin tapaboca en el subte de la capital, cuyos comercios volvieron a resguardar sus vidrieras con barricadas por temor a posibles desmanes.
Katherine Caldwell, de 61 años, que junto a su marido viajó desde Oregón durante cinco días para apoyar la cruzada de Trump, aseguró que «robaron la elección» y se declaró «totalmente segura» de ello, mientras agitaba una bandera roja con la inscripción «Trump es mi presidente», informó la agencia de noticias AFP.
Caldwell estaba rodeada de una multitud de simpatizantes del presidente saliente, entre ellos teóricos de la conspiración y miembros de la extremaderecha encabezada por el grupo Proud Boys.
Estos grupos planean celebrar varios actos en los que darán su apoyo al republicano y su negativa a admitir la derrota en las elecciones del 3 de noviembre pasado.
«Washington está siendo desbordada por gente que no quiere que la victoria electoral sea robada por los envalentonados demócratas de la izquierda radical. Nuestro país ya ha tenido suficiente. Los escuchamos (y amamos) desde la Oficina Oval», escribió Trump en Twitter.
«Si Pence está con nosotros, ganaremos la Presidencia. Muchos estados quieren enmendar el error que cometieron al certificar números incorrectos e incluso fraudulentos en un proceso Nnoaprobado por sus legislaturas estatales», agregó en un mensaje para presionar a quien fue nuevamente su compañero de fórmula en los comicios de hace dos meses.
Ante la llegada de los manifestantes, y en previsión de posibles enfrentamientos con otros grupos, las autoridades de Washington DC decretaron el cierre de algunas autopistas, así como restricciones al estacionamiento y al tráfico en el centro de la ciudad al menos hasta mañana.
La Guardia Nacional será desplegada para ayudar a los agentes de la Policía de Washington y la alcaldesa, Muriel Bowser, quien no descartó implantar el toque de queda, advirtió a los residentes que eviten el centro de la ciudad durante las protestas, informó la agencia Europa Press.
Los seguidores del actual jefe de Estado comenzaron a llegar ayer cerca del mediodía, sin distanciamiento social ni tapabocas en una plaza cerca de la Casa Blanca.
Para varios de ellos, los medios de comunicación exageraron la gravedad de la pandemia de coronavirus, que en Estados Unidos provocó la muerte de más de 357.000 personas y contagió a más de 21 millones.