La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, agradeció a sus compatriotas «la oportunidad» de haber ejercido su segundo mandato al frente de La Moneda, que finaliza en dos meses, y en un mensaje dirigido a su sucesor, Sebastián Piñera, sostuvo que a los chilenos “nadie podrá quitarles lo que ya se han ganado”.
Durante la inauguración del Museo Regional de Aysén, en el sur de Chile, Bachelet comenzó a despedirse y defendió su gestión de cara al futuro al afirmar que a los chilenos “nadie podrá quitarles lo que ya se han ganado: la certeza de que se puede seguir avanzando en derechos y protección, en integración y modernidad”.
En el acto en la ciudad de Coyhaique, a unos 1.700 kilómetros de Santiago, la mandataria resaltó que la obra del museo no fue sólo fruto de su gestión, sino que representa un proyecto nacional.
“Esta no es la obra de una presidenta o de un gobierno regional. Es la obra de un país que quería más equidad y mejor desarrollo y hoy está mejor capacitado para seguir avanzando”, dijo Bachelet, subrayando el perfil que buscó darle a su gobierno, informó el diario local La Tercera.
Las palabras de la mandataria elogiando las reformas impulsadas durante su gestión, se produjeron horas después de que Piñera acordara con los partidos de la coalición que apoyó su candidatura en los últimos comicios, no aprobar las iniciativas que el Ejecutivo pretende impulsar en el Congreso antes del recambio presidencial.
La eventual marcha atrás con las reformas impulsadas por la presidenta chilena a partir de un nuevo mandato de Piñera fue un debate que surcó la campaña electoral, en el que la propia Bachelet confió que un próximo gobierno de centroderecha no podría “borrarlas” debido al apoyo popular a esas iniciativas.
Sin embargo, el rechazo del mandatario electo, que retornará el 11 de marzo a La Moneda para ejercer su segundo mandato presidencial, a iniciativas que considera “malas” y contrarias a las propuestas que su alianza Chile Vamos defendió durante la campaña electoral, anticipa un escenario diferente al augurado por la dirigente socialista, y que se dirimirá en un parlamento donde el nuevo oficialismo será primera minoría.
Mientras, Bachelet reforzó ayer sus convicciones y se mostró en el sur chileno «orgullosa» de que «en vez de cifras, tengamos obras que mostrar, que cualquiera puede apreciar”.
“Quiero darles las gracias por estos años, por darme la oportunidad de ser su Presidenta, por haber creído en que podíamos hacer transformaciones para mejorar su calidad de vida”, cerró la mandataria a poco más de 60 días de dejar su cargo.