Llamado "Hippy", se trata de una iniciativa creada en 1969 en Israel que ahora se desarrolla en Rosario gracias a una alianza entre la Amia, la Kehilá Rosario y la asociación Siembra y Cosecha
El programa de educación no formal «Aprendiendo en Casa – Hippy» llegó por primera vez a la ciudad de Rosario, donde 35 familias con niños y niñas de 2 a 4 años que residen en el barrio de Villa Banana, e integrantes de la comunidad judía local, contarán con apoyo y acompañamiento para «lograr estimular el aprendizaje y favorecer la inserción escolar». En ese sentido, CLG dialogó con Liliana Sánchez, presidenta de Siembra y Cosecha, asociación civil que lleva años de trabajo en el barrio y que participa del desarrollo del programa educativo en Rosario.
Este programa fue creado en Israel en 1969 como respuesta comunitaria a las necesidades de alfabetización de los niños y niñas pertenecientes a hogares en situación de vulnerabilidad social. El mismo promueve el desarrollo temprano de niños y niñas de 2 a 4 años en situación de vulnerabilidad social. A través de su área de Infancia, la Amia lo implementa en Argentina desde 2009.
La llegada de la iniciativa a Rosario fue posible gracias a la alianza de trabajo establecida entre Amia, la Asociación Israelita de Beneficencia (Kehilá Rosario), la Asociación Siembra y Cosecha, y la Universidad Nacional de Rosario.
“A más de un mes de la puesta en marcha, ya se puede ver que las familias están muy entusiasmadas con los materiales y con la guía que reciben de las tutoras. Estamos muy contentos de que Hippy pueda extender su alcance y llegar a nuevas localidades de nuestro país”, expresó Laura Guardia Mayer, coordinadora de “Aprendiendo en Casa – HIPPY” de Amia.
Por su parte, la presidenta de la asociación Siembra y Cosecha, Liliana Sánchez, dialogó en CLG y contó cómo surgió la iniciativa que ya se está desarrollando en Villa Banana: «Desde hacía mucho tiempo veníamos hablando con la Asociación Israelita de Rosario y de Buenos Aires sobre que estaría bueno bajar el programa Hippy a un lugar donde una asociación civil trabaje paralelamente en lo educativo».
«El programa está apuntado a trabajar con niños de la primera infancia, de entre 2 y 4 años, por lo que lo primero es capacitar a las familias de esos niños porque ellos son los primeros formadores de los chicos. Apunta a los padres para que vuelvan a ser los primeros educadores y vuelvan a cumplir ese rol, que por ahí muchas veces estaba perdido. Es un programa educativo que es política de Estado en Israel», explicó.
Además, la referente social del barrio indicó que Siembra y Cosecha «firmó el convenio con la Amia y la Khelilá Rosario». Y destacó: «Es la primera vez que la comunidad judía se abre a una ONG que no es judía. Para el barrio eso es muy importante porque hay mucho respeto hacia ellos. Es un trabajo mancomunado inédito».
Por otra parte, Sánchez señaló: «Se los forma a los padres para que ellos sean los maestros de los chicos y hagan toda la tarea en casa. Se les entrega todos los cuadernillos y materiales, y tienen que completar un cuadernillo por semana. Están muy asombrados con lo que están haciendo porque ellos tienen un gran compromiso. Es emocionante la alegría y el compromiso que tienen los padres para completar los cuadernillos y enseñar».
«En esta edad, a pesar de que son chiquitos, les gusta jugar y aprender. Son niños muy inteligentes, pueden manejar un celular tranquilamente y completar un cuadernillo», agregó.
Siembra y Cosecha es una asociación civil que desde hace varios años trabaja en el fomento y desarrollo de la educación en Villa Banana, a través de convenios con la Universidad Nacional de Rosario para chicos desde 1° hasta 4° grado. «Ahora con este programa de 2 a 4 años hemos logrado completar y hacer lo que realmente queríamos, que era apuntar a las familias para que los chicos aprendan», concluyó Sánchez.