Casi el 90% de los jóvenes entre 16 y 24 años consume alcohol hasta cuatro veces al mes. El próximo sábado, la Facultad de Ciencias Médicas será sede de una jornada abierta para visibilizar el problema y reflexionar sobre los efectos de esta adicción.
El consumo de alcohol en Argentina crece de forma sostenida y preocupa especialmente entre los más jóvenes. Según datos oficiales, casi el 90% de los consumidores entre 16 y 24 años ingirió bebidas alcohólicas al menos cuatro veces al mes durante el último año, lo que marca una tendencia creciente que inquieta a profesionales de la salud, instituciones educativas y organismos públicos.
En este contexto, la Universidad Nacional de Rosario (UNR) impulsa una Jornada Abierta sobre Alcoholismo, prevista para el sábado 17 de mayo, de 8 a 16, en el Anfiteatro Débora Ferrandini de la Facultad de Ciencias Médicas. La actividad, gratuita y abierta a la comunidad, buscará generar un espacio de reflexión y propuestas para abordar una problemática que atraviesa todos los sectores sociales.
“La adicción al alcohol no tiene clase social ni edad. Afecta tanto a trabajadores como a estudiantes, a personas con alto nivel adquisitivo como a quienes viven en condiciones de vulnerabilidad”, advirtió Juan Sialle, director de la cátedra de Psiquiatría de la facultad y uno de los impulsores de la jornada. Según expresó, el objetivo del encuentro es “poner el tema en agenda con una mirada amplia e interdisciplinaria”.
El evento contará con paneles académicos, la participación de autoridades municipales, referentes sindicales y organizaciones sociales, y ponencias destacadas como las de Hugo Vida Fernández, de Aupac, quien hablará sobre el consumo en villas y barrios populares, y Horacio Tabares, que abordará “los intereses oscuros que banalizan el consumo de alcohol”.
Una tendencia alarmante
El último informe del Observatorio Argentino de Drogas de la Sedronar, basado en la encuesta nacional ENCoPraC 2022, reveló que más del 80% de los consumidores toma alcohol con frecuencia mensual, y que más del 50% de los jóvenes entre 16 y 24 años lo hizo en los últimos 30 días. De ese grupo, la mayoría lo hace por placer o curiosidad, y más del 78% en compañía de amigos.
En Santa Fe, la Agencia de Prevención del Consumo de Drogas (Aprecod) informó que el alcohol fue la tercera causa de consulta y abordaje, superando incluso al consumo de psicofármacos y drogas sintéticas.
Sialle remarcó que “el consumo comienza cada vez más temprano” y que el alcohol funciona como “puerta de entrada” a otras drogas. “Muchos adolescentes combinan alcohol con cocaína para mantenerse activos, en un círculo de riesgo cada vez más habitual”, alertó.
Un problema con consecuencias graves
El abuso del alcohol no solo deteriora la salud física —con enfermedades como cirrosis, pancreatitis o debilitamiento del sistema inmune—, sino que también tiene un impacto psíquico y social profundo. “Hay quienes ya no pueden pasar una hora sin consumir. Eso es adicción, y tiene consecuencias devastadoras no solo para la persona, sino también para su entorno”, advirtió el psiquiatra.
Desde la UNR insisten en que no se trata de criminalizar el consumo recreativo, sino de alertar sobre el uso problemático y cotidiano del alcohol, que muchas veces se instala sin control. “Hay jóvenes que organizan su vida en torno al consumo, y eso es lo que debemos revisar como sociedad”, concluyó Sialle.