Logró una mejoría tras la reactivación de la mayoría de los rubros del área, a pesar de la caída de 13,6%,
La producción de las pymes industriales cayó 13,6% en julio frente a igual mes del año pasado, aunque se recuperó respecto a meses anteriores, a partir de la reactivación de la mayoría de los rubros del área, luego de aplicar medidas para evitar el contagio de coronavirus, según un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
En ese sentido, la caída de julio contrasta con la que había registrado el sector los meses de junio (-25,3%), mayo (-34,9%), abril (-53,1%) y marzo (-28,8%), cuando comenzaron las medidas de aislamiento obligatorio ante el impacto de la pandemia de la Covid-19.
Al mismo tiempo, el uso de la capacidad instalada de la industria pyme subió a 58,3%, desde el 52,9% de junio y el 47,4% de mayo, mientras que solo el 11% de las firmas espera que la producción continúe bajando en los próximos meses contra le 27% que espera aumentos.
Según Came, si bien la reapertura de «prácticamente la totalidad de los rubros del área, impulsó la reducción en la tasa de declive anual del sector manufacturero» aún se continúa trabajando con bajos niveles de uso de su capacidad instalada y, en los primeros siete meses del año, la industria pyme acumula un descenso anual de 22,2%.
Aún así, un dato positivo del mes es el crecimiento del ramo Productos de caucho y plástico (+4,6%).
Un signo menos auspicioso es la disparidad de la baja entre las empresas más grandes y las más chicas ya que las firmas con más de 50 empleados cayeron 7,5% anual mientras las que tienen menos de 50 empleados declinaron 14,2% respecto de julio de 2019.
En la comparación anual, el menor declive ocurrió en Productos electrónicos e Informática, con un retroceso interanual de 7,8% a raíz de una mayor demanda de estos productos, señaló la Encuesta Mensual Industrial de CAME entre 300 industrias pymes de todo el país.
En Alimentos y bebidas la baja anual fue de 8,8% con mucha disparidad entre empresas ya que, por ejemplo, la elaboración de vinos y otras continúan con «una situación difícil».
«Sectores como Calzado y marroquinería continuaron con caídas muy profundas (44,5%), debiendo cerrar por varias semanas algunas fábricas frente a la escasa demanda y la reducción de los ATP del gobierno», aseguró el informe.
Por último, Indumentaria y Textil fueron los rubros con descensos más profundos en la comparación anual con una disminución de 34,2%, a raíz de los comercios cerrados y los protocolos de ingreso a los locales lo que «reduce la eficiencia del negocio que se traslada a los pedidos industriales».