Por Santiago Fiszbein
Hace 90 años un joven dibujante de 19 años llamado Dante Quinterno crea un personaje que se convirtió en uno de los personajes más queridos por grandes y chicos: Patoruzú.
El 19 de octubre de 1928 salió por primera vez en la páginas del diario «Crítica», pero tenía un nombre totalmente diferente al que conocemos hoy en día.
El cacique tehuelche que era dueño de media Patagonia se llamó Curugua – Curiguagüigua y apareció en las desventuras de «Don Gil Contento». Pero como lo vieron complicado lo llamaron «Patoruzú» y de ahí en más fue un furor.
Los chicos estaban felices de leer sus historietas y empezaron a aparecer muchos personajes como la «Chacha», Upa, Ñancul y otro que tuvo igual popularidad que fue Isidoro Cañones, el típico chantún porteño.
Tuvo versiones cinematográficas en 2004 y 2006, pero la mejor de todas fue el corto «Upa en apuros» que es de 1942 con la supervisión del propio Quinterno. Un dibujo impecable que no tenía que envidiar a los que se realizaban en Estados Unidos.