Un tren de pasajeros descarriló este martes a unos 20 kilómetros al norte de Rabat, provocando siete muertos y más de 80 heridos, según un balance oficial sobre el terreno, brindado a la prensa local.
Hay «siete muertos que lamentar», indicó el director regional de Salud de Rabat Salé Kenitra, Abdelmoula Boulamizat, citado por la agencia MAP.
Un balance anterior indicó que hubo además 86 heridos, según declaró Mohamed Rabie Jlie, director general de la compañía ferroviaria que se trasladó al lugar. Algunas autoridades llegaron a mencionar un centenar de heridos, según informaciones que obtuvo la AFP.
«Se abrió una investigación para determinar las causas del accidente», añadió en un video difundido por los medios locales.
Imágenes espectaculares del accidente ocurrido hacia las 10:00 GMT, a una veintena de kilómetros al norte de la capital Rabat, a la altura de la ciudad de Sidi Buknadel, circulan por las redes sociales, cuyos usuarios se muestran virulentos hacia la empresa.
Las imágenes muestran varios vagones volcados sobre un costado, con la locomotora casi pulverizada por el accidente. El maquinista habría muerto, según varios medios.
El rey marroquí decidió costear los gastos de los entierros de las víctimas, y los heridos serán trasladados al hospital militar de Rabat siguiendo instrucciones reales, según un comunicado de su gabinete.