El músico aceptó su responsabilidad en el accidente ocurrido en 2019 y en el que murieron dos integrantes de su banda
El músico de cumbia Rubén Castiñeiras, más conocido como “El Pepo” acordó una pena de cuatro años y siete meses de cárcel, tras haber aceptado su responsabilidad en un accidente de tránsito ocurrido en 2019, y que le costó la vida a dos integrantes de su grupo.
El acuerdo se rubricó mediante un juicio abreviado en el Juzgado en lo Correccional número 3 y además Castiñeiras tendrá prohibido manejar durante diez años y deberá someterse a un tratamiento psiquiátrico.
“El Pepo” aceptó el cargo de homicidio culposo séxtuplemente agravado por conducción imprudente, negligente y antirreglamentaria, bajo los efectos de estupefacientes y con un dosaje de 1,02 gramos de alcohol por litro de sangre, por exceso de velocidad, por mediar culpa temeraria y por la pluralidad de
víctimas y lesiones culposas agravadas.
Por lo tanto, recibió una pena de cuatro años y siete meses de prisión de efectivo cumplimiento, accesorias legales, inhabilitación especial para conducir vehículos automotores por el término de diez años y pago de las costas procesales. El imputado está cumpliendo prisión domiciliaria, goza de salidas laborales y se estima que cumplirá lo que resta con el mismo régimen.
Castiñeiras está acusado por la muerte del trompetista Nicolás Carabajal, como así también de su asistente, Ignacio Abosaleh, ya que conducía el vehículo -Honda CRV- que volcó en la ruta 63, a la altura de la ciudad bonaerense de Dolores.
En esa ocasión, “El Pepo” y los integrantes de su grupo se dirigían a Villa Gesell para dar un recital. Como consecuencia del siniestro también resultó herida Romina Candia, quien luego pudo recuperarse.
El músico estuvo internado en el hospital San Roque, de Dolores, luego fue trasladado a la comisaría número 1 de Chascomús y posteriormente a la Alcaldía número 3 de Melchor Romero, en La Plata. Allí se fracturó una pierna mientras jugaba al fútbol, por lo que le concedieron el arresto domiciliario y también la posibilidad de seguir grabando.