La cifra crece día a día y ya genera gran zozobra en la sociedad. La última fue el crimen de Zoe Romero, de apenas 15 años
El crimen de una adolescente de 15 años de cinco balazos al ser atacada a quemarropa por delincuentes que llamaron a la puerta de su casa, la misma en la que meses atrás fueron heridas otras tres personas también en una balacera, en el barrio Moderno, ubicado en la zona oeste de Rosario, engrosó la cifra de la alarmante cifra de menores asesinados en la ciudad.
Con el crimen de Zoe Romero (15) ascienden a 19 los asesinatos de menores de edad durante el 2022 en Rosario, dos de los cuales ocurrieron en esta primera semana de agosto, ya que el pasado lunes 1 mataron a Lucas Vega Caballero, un jugador de las inferiores de Rosario Central, de 13 años, en otra balacera.
El hecho que tuvo como víctima a Romero ocurrió anteanoche en el barrio Moderno.
La adolescente atendía un almacén instalado en la parte delantera de la casa donde vivía, situada sobre la calle Garzón al 3800, y abrió la puerta para atender un llamado al timbre, de acuerdo a lo determinado por los investigadores.
En esas circunstancias, y sin mediar palabras, hombres que se movilizaban a bordo de una moto abrieron fuego al menos 15 veces contra la chica, quien resultó herida.
Los agresores escaparon en la moto que tripulaban a alta velocidad, mientras que la adolescente cayó malherida en la vereda y fue trasladada por vecinos y familiares al hospital de Emergencias de Rosario.
Los médicos constataron que Romero presentaba cinco heridas de arma de fuego, dos de las cuales le impactaron en el tórax, una en el abdomen y otras dos en la zona dorsal, que le provocaron la muerte poco después de su ingreso al centro asistencial, dijeron las fuentes.
De la escena del crimen los peritos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) secuestraron 15 vainas servidas calibre 9 milímetros y dos calibre .40, añadieron los informantes.
Fuentes de la investigación recordaron que ese domicilio había sido blanco de un ataque similar en octubre del año pasado por parte de varios hombres que dispararon contra el frente desde un auto.
En ese episodio, una pareja que se encontraba en el lugar y un niño de 4 años, todos ellos familiares de la adolescente ahora asesinada, fueron alcanzados por las balas y sufrieron lesiones, apuntaron los informantes.
Por la mecánica del ataque, una de las hipótesis que manejan los investigadores es la de un crimen ejecutado al voleo por miembros de bandas criminales que se disputan territorios en los barrios de la periferia de Rosario para la venta de drogas al menudeo.
Los voceros añadieron que además se investiga al entorno de la menor, con el fin de establecer si la balacera estaba dirigida a alguien en particular en venganza o por un ajuste de cuentas y Romero fue quien atendió al llamado a la puerta por causalidad.
El crimen de la adolescente es investigado por la fiscal de homicidios dolosos de turno en Rosario, Gisela Paolicelli, quien ordenó una serie de medidas que apuntan a determinar la mecánica del hecho e identificar a los atacantes.
Romero es la segunda menor de edad asesinada en estos primeros días de agosto, ya que el lunes último, en una balacera similar, fue asesinado Lucas Vega Caballero, quien era jugador de las divisiones inferiores de Rosario Central.
Ese hecho ocurrió la noche del pasado lunes, cuando el chico estaba junto a otros tres adolescentes de 15 años, entre ellos su hermano, en la intersección de las calles Génova y González del Solar, del barrio Emaús.
En esas circunstancias, desde un auto blanco personas dispararon hacia el grupo al menos 20 balazos y mataron al futbolista, al tiempo que hirieron a dos de los chicos que lo acompañaban, a uno de suma gravedad.
Desde Club Atlético Rosario Central lamentaron el hecho y exigieron profundizar la investigación, mediante a un comunicado difundido en las redes sociales.
El crimen de Romero tampoco fue el único cometido anoche en una balacera en Rosario, ya que casi a la misma hora, alrededor de las 21.35, sobre la calle Bielsa al 6400, y Cullen, del barrio Ludueña, ubicado en la zona noroeste de Rosario, fue asesinado a tiros un hombre identificado como Julio Alberto Sosa (58).
También en este caso, la víctima fue atacada a balazos por dos personas que le dispararon desde una moto y huyeron.
Sosa cayó malherido y fue trasladado por familiares y vecinos al hospital de Emergencias, donde los médicos constataron que presentaba múltiples heridas de arma de fuego que le originaron la muerte a poco de su ingreso al centro asistencial.
De la escena del crimen los peritos secuestraron varias vainas servidas que fueron enviadas a peritar.
El cuerpo de Sosa fue trasladado al Instituto Médico Legal de la Unidad Regional II de Rosario para la autopsia de rigor.
Con ese homicidio elevó a 171 la cifra de asesinatos cometidos en el Departamento Rosario en lo que va del año.