Este lunes dará comienzo la 26° edición del Festival Internacional de Poesía (FIPR), el más importante del país y uno de los más reconocidos a nivel latinoamericano. Del mismo participarán 38 poetas de 15 países y tendrá como sedes principales al Centro Cultural Roberto Fontanarrosa, la Plataforma Lavardén y el Centro Cultural Parque de España. También habrá actividades en bibliotecas, institutos de educación, asociaciones culturales, bares y otros espacios públicos y privados.
El Festival es organizado por Ministerio de Innovación y Cultura de la Provincia de Santa Fe, la Secretaría de Cultura y Educación de la Municipalidad de Rosario y el Centro Cultural Parque de España y tuvo su primera edición en 1993. Para este año contará con invitados de Argentina, Alemania, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, España, Estados Unidos, Italia, Israel, México, Nueva Zelanda, Paraguay, Perú y Uruguay.
“Para los aficionados a la poesía, tanto lectores como escritores y editores de la ciudad, el Festival representa algo importante. Vienen muchos poetas y editores de otras ciudades y del extranjero, gente que trae y se lleva libros, revistas, ideas, vivencias. Es un momento breve pero intenso, de mucho intercambio”, le cuenta a Con La Gente Daniel García Helder, integrante del comité organizador del FIPR, quien agrega: “Además de las lecturas principales en el C.C. Fontanarrosa, el Parque de España y el bar OUI, en Plataforma Lavardén se ofrecen talleres gratuitos, que los aficionados a la poesía de Rosario aprovechan todos los años. Van poetas a espacios de encierro como la Unidad 5 de mujeres, la Unidad 3 de varones o el IRAR, donde se desarrollan talleres de poesía todo el año enmarcados en el Festival”.
A lo largo de su historia, por el FIPR han pasado más de 1300 poetas provenientes de 59 países del mundo y muchas de las figuras más influyentes de la poesía de la segunda mitad del siglo XX y la primera del siglo XXI, lo que lo convierte en un referente no solo nacional, sino a nivel continental. “Es sin duda el más grande y sostenido de Argentina y, junto al Festival de Medellín, el más antiguo y acreditado de Latinoamérica, no porque lo digamos nosotros sino por el lugar que se ganó, después de 25 ediciones consecutivas, con un promedio de 40 invitados por año, de todas partes del país y del mundo”.
En esta edición se podrá disfrutar de poetas de como Dani Umpi (Uruguay), Eileen Myles (EE.UU.). Elvira Espejo Avaca (Bolivia), Camino Román (España), y Martín Rodríguez y Fernanda Laguna (Buenos Aires), entre otros. La ciudad de Rosario dirá presente a través de Marina Maggi, Pablo Bilsky, Sergio Kern y Gabby Cicco.
Durante el Festival se llevará a cabo la segunda Residencia FIPR, orientada a jóvenes poetas de Argentina, Bolivia, Chile, Paraguay, Perú y Uruguay. Los participantes formarán parte de una experiencia de convivencia, intercambio, reflexión y formación especializada en poesía. A partir de una convocatoria abierta se seleccionaron 21 poetas de entre 18 y 25 años. Los rosarinos Fátima Toloza, Emilia Pérez y Lisandro Coronel se encuentran entre los elegidos.
“Las últimas semanas son siempre muy complicadas, de mucho trabajo y estrés. Este año tenemos 38 invitados de 15 países diferentes, más los menores de 25 años que hacen la residencia. Se podrán imaginar lo que significa eso en términos de producción y logística, comunicación, etc”, enfatiza García Hendel, consultado por el trabajo de la organización a pocos días del comienzo.
También habrá una feria en la que participarán alrededor de 100 editoriales. La misma podrá visitarse el jueves 20, viernes 21 y sábado 22 de septiembre de 15 a 21h en el Centro Cultural Roberto Fontanarrosa (San Martín y San Juan) y el domingo 22 de 14 a 18h en el Parque de España (Mitre y el río).
La programación incluye la presentación de los libros Facundo Marull. Poesía reunida (Editorial Municipal de Rosario), y Los ojos nuevos, y el corazón. Antología de la poesía moderna en Santa Fe (Espacio Santafesino Ediciones).
Sobre las expectativas que genera el festival, García Hendel afirma que “siempre esperamos trabajar a sala llena, pero las jornadas de lectura son largas, de 15 a 21, luego están las trasnoches en el bar, que también se llena; el público baja de la sala de lectura a la feria de editoriales, se produce un recambio permanente, es difícil hacer la cuenta, pero repasando los años anteriores, se podría decir que cada vez viene más público, no solo de Rosario sino de otras ciudades, o sea que para lo que es la audiencia de los festivales de poesía, que nunca es masiva, el de Rosario congrega mucha gente”.
