Gustavo Hornos, presidente de la Cámara Federal de Casación Penal, está cuestionado por haberse reunido con Mauricio Macri, entre 2015 y 2018
La jueza federal con competencia electoral, María Servini, envió este lunes una carta al presidente de la Cámara Federal de Casación Penal, Gustavo Hornos, pidiéndole que renuncie al cargo «en aras del bien de la República».
La jueza Servini, internada en observación por un cuadro de Covid-19, dirigió la misiva a Hornos y en el último párrafo, luego de analizar su situación, le pide que «dé un paso al costado».
Hornos, junto al también camarista Mariano Borinsky, están cuestionados por haberse reunido con Mauricio Macri, entre 2015 y 2018, en reiteradas oportunidades y previo a tomar decisiones que involucraban a miembros de la oposición.
«Los 45 años que llevo en la Justicia me han dado sobrada experiencia para reparar con tristeza que existe una guerra dentro de ese Tribunal que, francamente, como ciudadana y magistrada, me angustia», señaló Servini.
Para la jueza, esa disputa «solo trasciende el egocentrismo de ciertos integrantes en detrimento del ejemplo que deben dar a la sociedad como miembros de tan importante Tribunal revisor de sentencia penales».
La magistrada no dudó de que todo ello «perjudica tremendamente la imagen de la justicia y da motivos para que la condena social se extienda a todo el Poder Judicial».
«Las Instituciones están primero que los intereses personales de los hombres y mujeres que la integran», antepuso Servini, y añadió para cerrar su carta: «Dada la situación tal como está planteada públicamente, dé una muestra de desinterés y civismo, dando un paso al costado y renuncie a la representación de la que esta imbuido, en aras del bien de la República».