El país asiático suele ofrecer una amplia amnistía a miles de presos con motivo de las celebraciones del Año nuevo budista
La junta militar que controla Myanmar anunció este sábado una amnistía para más de 23.000 presos en las cárceles del país con motivo de la celebración del Año Nuevo budista, mientras sigue deteniendo personas en protestas antigubernamentales.
La liberación comprende exactamente 23.047 presos, entre ellos 147 extranjeros que serán deportados de Myanmar, según el decreto firmado por el general Min Aung Hlaing, líder de la junta que tomó el poder en un golpe de Estado en febrero pasado.
Asimismo, la amnistía va acompañada de una reducción de condena para un número todavía indeterminado de presos, según la agencia de noticias Europa Press.
De momento habrían sido liberados en torno a 800 prisioneros, entre ellos algunos miembros la conocida como la Generación del Pavo Real, un grupo de poetas y escritores satíricos detenidos en abril de 2019.
El país asiático suele ofrecer una amplia amnistía a miles de presos con motivo de las celebraciones del Año nuevo budista.
Myanmar atraviesa una grave crisis desde que la que fuera líder del gobierno civil del país, Aung San Suu Kyi, fuera detenida durante el golpe militar del pasado.
Los generales golpistas tacharon las elecciones de noviembre pasado -que ganó el partido de la Nobel de la Paz Suu Kyi- de fraudulentas y afirman que tomaron el poder respetando la Constitución.
Miles de personas salieron a la calle para protestar contra la junta, en unas manifestaciones que fueron fuertemente reprimidas y en las que se estima que unas 715 personas murieron y más de 3.000 fueron detenidas.
La situación en la ex Birmania se recrudeció durante el último mes, lo que llevó a la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, a acusar a las autoridades de cometer «graves violaciones de Derechos Humanos» e incluso «posibles crímenes contra la Humanidad».