La medida de fuerza se da en la Ciudad de Buenos Aires y también en algunos distritos de la Provincia. Reclaman que se vuelva a la virtualidad ante la suba exponencial de casos de coronavirus
Docentes porteños y de algunos distritos bonaerenses comenzaron hoy un paro, que se extenderá por 48 horas, para reclamar a las autoridades que suspendan temporalmente las clases presenciales y se vuelva a la virtualidad debido a la segunda ola de casos de coronavirus.
Aunque tanto Nación como Ciudad y Provincia coinciden en que las aulas no son un foco de contagio, sindicatos docentes iniciaron la medida de fuerza, convocada por Ademys y a la que se sumó UTE-Ctera, uno de los dos gremios con mayor cantidad de afiliados en la Capital Federal, y también adhirieron los maestros de algunos partidos bonaerenses.
El principal reclamo es «la suspensión temporal de la presencialidad en CABA», al remarcar que «la salud y la vida son una prioridad». Al respecto, el secretario gremial de Ctera y secretario general adjunto de UTE, Eduardo López, consideró que «es necesario el cierre» de las clases al considerar que la Ciudad da niveles de contagios por porcentajes en lugar de darlos por cantidad de afectados.
En diálogo con Rock and Pop, el dirigente sindical señaló que en el último récord de 27 mil casos de coronavirus «se dieron 167 contagios en un día» en el ámbito educativo, a lo que definió como «un desastre» para el sector. Además, López insistió en pedir «la suspensión temporal de las clases presenciales en la Ciudad de Buenos Aires hasta que deje de crecer esta locura de contagios y haya camas (de terapia intensiva) en la Ciudad».
El gremialista reconoció que «lo mejor es la presencialidad, sin dudas», pero consideró que en el contexto de pandemia «fue mejor la experiencia a distancia del año pasado, los chicos estudian más, se contagian menos y hay más camas».
Mientras tanto, en los distritos de La Matanza, Escobar, Ensenada, Marcos Paz y Tigre también se inició la medida de fuerza, que se extenderá hasta el jueves. También se registró adhesión en Morón, Ituzaingó, Merlo, San Martín, Tres de Febrero, San Fernando, General Sarmiento, La Plata y Berisso, pese a que la medida de fuerza no fue avalada por Suteba.