En el Día del Veterano y de los Caídos en Malvinas, CLG dialogó con tres ex combatientes rosarinos, quienes hablaron sobre cómo mantienen la "lucha contra el olvido" en este contexto
Por Santiago Ceron
«Lo peor que nos puede pasar es olvidar». Con esa frase un ex combatiente rosarino resume el enorme significado que hay detrás del 2 de abril. Una fecha que representa la incansable lucha de cada veterano por impedir que lo que se inició allá por 1982 se borre de la memoria del pueblo. Es el anhelo de que ningún soldado caído sea olvidado y que todos tengan presente qué sucedió y por qué. Sin embargo, al igual que en 2020, este 2 de abril está atravesado por la pandemia, una situación que trae más desafíos y más dolor.
Como en cada Día del Veterano y de los Caídos en la guerra de Malvinas este viernes se recordará a cada soldado que dejó su vida en las islas, muchos de ellos apenas superando la mayoría de edad, y todo en un contexto de gravísima situación social, política y económica, en una Argentina atravesada por la dictadura. Pero en este 2 de abril los ex combatientes también homenajearán a otros veteranos: a aquellos que perdieron la vida por el coronavirus. Ellos también fueron alcanzados por la pandemia, y por eso ocuparán un lugar especial en las actividades que se realizarán durante la jornada.
En este contexto, CLG dialogó con tres rosarinos ex combatientes de la guerra de Malvinas: Claudino Chamorro, Claudio Petruzzi y Juan Lederhos. Cada uno de ellos relató sus experiencias en el campo de batalla y brindó su propia visión sobre lo que representa esta fecha. Sin embargo, los tres hicieron énfasis sobre algo indispensable: la memoria.
Además, destacaron la solidaridad que los ex combatientes rosarinos mantuvieron pese a la pandemia, sosteniendo su campaña de invierno en la etapa más dura de la cuarentena. En aquellos días de encierro donde la demanda alimentaria se disparaba en las zonas más golpeadas, los veteranos de Malvinas estuvieron allí con su camión sirviéndole un plato de comida caliente a quien lo necesitara.
A continuación, los testimonios de los tres ex combatientes rosarinos:
Claudino Chamorro
El presidente del Centro de Ex soldados Combatientes de Malvinas de Rosario se refirió en primer lugar al contexto de pandemia que vuelve a atravesar al Día del Veterano y de los Caídos, y resaltó que este año haya acto oficial: «Es un año atípico que nos privó de lo cotidiano de nuestras vidas, y que nos quitó a nuestros mayores, familiares, amigos, vecinos y camaradas. Afortunadamente, este año vamos a poder tener los actos correspondientes al 2 de abril».
Por otro lado, habló sobre la importancia de conmemorar cada año esta fecha: «Honrar y homenajear a nuestros héroes es nuestro deber como ciudadanos y argentinos. No sólo los veteranos de guerra, sino todo el pueblo argentino debe rendirle honores a quienes brindaron su vida defendiendo los intereses de la patria. Los que fuimos dignos de volver, cada 2 de abril y todos los días rendimos los honores. Deseamos que todos los argentinos en cada rincón de nuestra patria también podamos hacerlo, ellos se merecen todo. Nuestro respeto y nuestro acompañamiento a los familiares por siempre, porque ellos llevan su luto en silencio hace 39 años».
Cada invierno los grupos de ex combatientes salen a las calles con su camión y su gran olla para repartir platos de comida caliente a personas en situación de calle. Pese a la pandemia, el 2020 no fue la excepción: «Nosotros cambiamos el dolor y la bronca de la guerra con acciones solidarias. Esto lo venimos haciendo desde hace muchísimos años, hace casi 30 años que lo hacemos. El 2020 fue difícil. Nosotros teníamos un recorrido habitual y con la pandemia tuvimos que ir a lugares específicos, nos decían a dónde teníamos que estar. Este año todavía no tenemos nada coordinado porque estamos esperando a ver qué pasa. Estamos al pie del cañón, preparados para ayudar cuando se lo necesite».
Al ser consultado sobre qué es lo que los mueve a mantener la lucha por Malvinas, Chamorro expresó: «El motor es el de mantener viva la memoria de nuestros héroes, el de malvinizar, el de sembrar memoria y acompañar a nuestro pueblo. Somos parte de una sociedad, hoy caminamos entre la gente. Tratamos de ayudar cuando corresponde y cuando se nos necesita. El Centro de Ex Combatientes de Rosario es una institución que se ha sabido ganar el respeto de toda nuestra sociedad, no sólo a nivel local, sino también a nivel provincial y nacional».
«Esperemos que esta situación en la que brindamos un plato de comida algún día no la tengamos que hacer porque no haya gente que no tenga para comer o que no tenga un lugar donde dormir. Lo que queremos los veteranos de guerra es una patria grande para todos, donde tengamos salud educación y trabajo, ese es nuestro deseo», concluyó.
Claudio Petruzzi
Las horas previas a la guerra y el desembarco en las islas: «El 1º de abril por la noche cuando estábamos en Comodoro Rivadavia nos comunicaron que al día siguiente íbamos a partir hacia Malvinas porque se iban a recuperar las islas. Tenía 18 años, estaba haciendo el Servicio Militar Obligatorio en Colonia Sarmiento, Chubut, a 200 kilómetros de Comodoro. Veníamos de estar una semana acuartelados sin conocer el destino. Ese mismo día nos trasladaron a Comodoro, había compañeros nuestros que ya no estaban en el cuartel. Llegué a Malvinas el 2 de abril a la mañana», contó Petruzzi.
«Ese fue el inicio de nuestra historia, muchos de los protagonistas podemos dar las gracias de estar con vida, por eso siempre tenemos que recordar a quienes dejaron su vida en las islas en defensa de nuestro territorio nacional, y recordar a nuestros compañeros que se fueron yendo. Son muchos los que nos están abandonando en esta etapa tan difícil», agregó.
Al ser consultado sobre lo que representa esta fecha, expresó: «Desde hace 39 años que esta fecha está en uno todos los días. En nosotros como ex combatientes el 2 de abril está siempre».
Por otra parte, Petruzzi se mostró compungido por el avance de la pandemia y lo comparó con lo que fue la guerra: «Este enemigo invisible que aún nos acecha está latente. En Malvinas teníamos identificado quién era el enemigo, hoy no lo vemos. No podemos decir que una guerra y una pandemia son iguales, pero sí son similares. Se viven situaciones muy parecidas. Toda la sociedad ha atravesado la situación que pasamos nosotros en varios momentos cuando estábamos en las islas: el aislamiento, el sentir que el enemigo te está acechando y que está en juego la vida y la muerte. Esto seguramente va a dejar sus secuelas, como el estrés postraumático. Hemos perdido a muchos compañeros por el virus, por eso va el abrazo inmenso a sus familias».
Además, destacó la ayuda llevada adelante por los veteranos y destacó los cuidados que se tuvieron durante la pandemia: «Dentro de los agradecimientos y la memoria, es fundamental tener la presencia de nuestro camión con los compañeros llevando una ración de comida a las personas en situación de calle durante todo el invierno. También quiero hacer una mención especial a que los compañeros han salido indemnes gracias a mantener los cuidados, ninguno se contagió durante las tareas. Es algo importante a destacar, ya que tiene que ver con el cuidado y el respeto a los demás».
«A todos nos costaba salir a la calle porque estábamos invadidos por el temor a contagiarse, pero los compañeros siempre estuvieron presentes, mantuvieron los protocolos y eso es digno de destacar. El camión nunca dejó de salir, la cocina siempre estuvo presente y el equipo de compañeros pudo transitar esa etapa libre del virus», añadió.
Sobre lo que moviliza a los ex combatientes a seguir «malvinizando» en cada 2 de abril, señaló: «El motor tiene que ver con mantener vivo el recuerdo, la memoria. Nosotros somos parte de esta historia contemporánea. Hoy podemos brindar un testimonio nosotros mismos. El objetivo y el mensaje es mantener vivo lo que fue y es Malvinas. Las islas fueron, son y serán nuestras, y en ellas está parte de nuestras riquezas, es algo que nos pertenece, así como la cantidad de pequeñas Malvinas que tenemos distribuidas en el resto del país. El mensaje es luchar por lo que nos pertenece».
«Queremos poder ir pasando la posta para cuando ya no estemos, para que esto no quede en el olvido. Lo peor que nos puede pasar es olvidar. Es una lucha contra el olvido. Tenemos que apostar a la educación, cuanto más nos informemos de Malvinas más herramientas vamos a tener para que vuelvan a estar con nosotros. Hay que recuperarlas por el lado de la diplomacia y la paz, pero tienen que ser nuestras. Nuestras son», concluyó.
Juan Lederhos
Lederhos es un ex submarinista que fue tripulante del ARA Santa Fe y luego prisionero en un barco inglés. El rosarino recordó cómo fue el viaje a las islas: «El 26 de marzo estábamos partiendo y para el 31 ya estábamos promediando la llegada a Malvinas con una agrupación de buzos tácticos que eran los encargados de marcar la playa para el posterior desembarco de Infantería. Yo en ese momento tenía 22 años», relató.
El ex combatiente aseguró que «para los veteranos de guerra todos los días es Malvinas». Y agregó: «Es un recuerdo permanente, más allá de la experiencia que cada uno vivió. Uno sale a la ruta y se encuentra un cartel que dice las Islas Malvinas son Argentinas o una calcomanía en un auto. En la calle uno ve el recuerdo de Malvinas permanentemente, más allá del pensamiento de cada uno».
Con respecto al contexto de pandemia, Lederhos indicó: «Esta pandemia nos encontró distanciados de todos nuestros camaradas. Nosotros nos podíamos reunir y recordar hechos y anécdotas de lo sucedido. Esta pandemia nos privó un poco de todo eso, pero gracias a la tecnología estamos en contacto permanente. En estos días es cuando más se potencia la gesta y se traen más recuerdos de lo vivido».
En ese sentido, se refirió a los ex combatientes que murieron a causa del Covid-19: «A nivel local y nacional hemos perdido a muchos compañeros por el coronavirus. Cada vez somos menos en el listado general. Todos promediamos más o menos la misma edad, por encima de los 60 años».
Con respecto al 2 de abril, resaltó la importancia de seguir siendo escuchados: «A pesar de que hayan pasado 39 años, a uno lo pone en un estado de tensión recordar. Generalmente somos convocados a las escuelas para contar nuestras experiencias y contestar preguntas, y eso es lo que a uno lo impulsa a seguir en este camino de no olvidarnos de lo que fue Malvinas y no olvidar a todos los compañeros que quedaron allá».
Izamiento y acto oficial
A diferencia del 2020 donde todas las actividades fueron virtuales, en este Día del Veterano y de los Caídos en la guerra de Malvinas los ex combatientes harán el tradicional izamiento de la bandera en el Monumento a las 8 y por la tarde se realizará el acto central en el Cenotafio a los Caídos, en el Parque Nacional a la Bandera, a las 18.