La fábrica de cosechadoras Vassalli SA, redujo de ocho a cuatro horas diarias las jornadas laborales. La medida comenzó este jueves y se extiende por 10 días. Igualmente, la empresa se comprometió a pagar los salarios de manera completa.
Luego de más de un mes de conflicto, las actividades en la fábrica de Firmat nuevamente se ven afectadas. El secretario general de la seccional firmatense de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Diego Romero, en declaraciones a la emisora local FM 95.9, confirmó que el planteo fue aceptado por los trabajadores ya que la firma se comprometió a pagar la totalidad de los jornales para no repercutir en los ingresos laborales.
Los detalles no trascendieron pero la medida habría sido adoptada para reducir los costos fijos que la empresa tiene en materia de servicios y que no sería acorde al ritmo de las operaciones productivas actuales.
Vassalli está a la espera de que se concrete en breve el salvataje financiero que le prometió el Ministerio de Producción de la Nación, con la condición de que presente un plan de negocios a fin de garantizar sustentabilidad. La firma también aguardaría una suma de dinero que le libera el Banco Nación y que utilizaría para invertir en materia productiva.
«Vamos a probar» y «esperar como se van dando las negociaciones», dijo Romero, en relación al esquema de trabajo que momentáneamente encarará la empresa con la vista puesta en lo que parece ser una planificada reactivación a corto, mediano y largo plazo.
El comunicado firmado por el CEO de Vassalli, Luis Cagliari, plantea al personal su optimismo al sostener: «Tenemos por delante la tarea de volver a colocar a nuestra empresa a la cabeza de la industria metalmecánica del país». Y tras anunciar que «la semana pasada se concretó el convenio de accionistas que permite el ingreso de un nuevo equipo de gestión del cual soy la cara visible en Firmat» destacó que «la Nación comprometió un apoyo económico que se irá desembolsando en tramos de 25 millones de pesos desde agosto».
Y se añadió en la nota: «Necesitamos esos fondos para poder reconstruir el capital de trabajo de la empresa y dar inicio a un nuevo programa de fabricación de cosechadoras y repuestos para estar listos a enfrentar la demanda de nuestros productos y servicios».