La situación es "muy, muy mala en este momento, con una enorme presión, y en algunos casos parece una zona de guerra", afirmó el asesor científico del Gobierno británico, respecto al aumento de los contagios por Covid
Los hospitales británicos están bajo «una enorme presión» debido al aumento de pacientes con coronavirus, advirtió hoy el asesor científico del Gobierno Patrick Vallance, para quien la situación en algunos de ellos se asemeja a la de una «zona de guerra».
La situación es «muy, muy mala en este momento, con una enorme presión, y en algunos casos parece una zona de guerra en términos de lo que la gente tiene que gestionar», afirmó Vallance al canal privado Sky News.
El Reino Unido se ve duramente golpeado por una nueva ola de infecciones atribuida a una variante del coronavirus que se considera mucho más contagiosa.
Confinado por tercera vez en un intento de contener la pandemia, es el país más castigado de Europa con más de 91.000 muertes confirmadas por Covid-19, incluido el récord de 1.820 fallecidos reportado hoy. Los casos positivos son casi 3,5 millones entre 66 millones de habitantes.
Este número creciente de casos y muertes está ejerciendo una gran presión en los hospitales del país, donde hay actualmente 37.946 enfermos graves, 3.916 de ellos con respiradores, mucho más que durante la primera ola de la pasada primavera.
Desde principios de diciembre, el Gobierno británico viene realizando un ambicioso programa de vacunación masiva con la esperanza de poder desconfinar gradualmente en marzo.
Más de 4,2 millones de personas -mayores de 80 años y personal sanitario- ya recibieron una primera dosis de las vacunas de Pfizer/BioNTech o AstraZeneca/Oxford y Londres tiene el objetivo vacunar a un total de 15 millones de personas para mediados de febrero.
«Es muy probable que la vacunación regular sea necesaria al menos durante unos años y creo que es muy probable que estas vacunas tengan que cambiar un poco como la gripe cada año» debido a las mutaciones del virus, consideró Vallance.