El 23 de noviembre de 1977, un movimiento sísmico de magnitud 7,50 en escala Richter paralizó al país. En esta nota, las imágenes de la tragedia
El 23 de noviembre de 1977, hace exactamente 43 años, la provincia de San Juan se vio paralizada por una catástrofe natural. Un movimiento sísmico de gran intensidad destruyó gran parte de la provincia. Se trató de uno de los mayores terremotos registrados en el país. En recuerdo a este día, desde 1981, el 23 de noviembre se celebra el Día de Defensa Civil Argentina.
El reloj marcaba a las 6.23 cuando un terremoto de magnitud 7,50 en escala Richter despertaba a cientos de sanjuaninos que miraban sorprendidos como se derrumbaban los edificios de su alrededor.
El epicentro del movimiento telúrico estuvo en la sierra de Pie de Palo. De esta manera, los departamentos más afectados fueron Caucete, 25 de mayo, 9 de Julio, San Martín y Angaco. El gran sismo se percibió con asombro en todo el país por su extensa duración.
Aunque no hay datos precisos del número de decesos se estima que el terremoto dejó entre 65 y 100 muertos, de los cuales al menos 16 eran niños, y más de 300 heridos. El departamento sanjuanino quedó cubierto de adobes y desolación. San Juan volvió a quedar practicante en ruinas.
El desastre se observó en las calles: 142 millones de dólares dejó en pérdidas el terremoto en materia de estructura social, 4 escuelas se derrumbaron por completo, 150 centímetros de profundidad tuvieron las grietas más grandes que se abrieron en el suelo.
Desde aquel 23 de noviembre hasta el 14 de diciembre hubo al menos 340 réplicas, lo que hizo que la población viviera en permanente zozobra. A tal punto que muchos optaban por dormir en los patios de las casas.
Ese terremoto del 77 para muchos quedó grabado en la memoria. A partir de entonces, San Juan inició un camino de transformación edilicia y así surgió una nueva ciudad con edificaciones sismorresistentes.