El máximo mandatario culé y su directiva decidieron presentar su dimisión al frente del club.
Josep María Bartomeu presentó su dimisión en la reunión de comisión celebrada este martes en la que el resto de los directivos acompañaron la decisión del máximo dirigente, según confirmaron los principales medios de Cataluña. La renuncia se da después de que él mismo, en conferencia de prensa, desmintiese que existía esta posibilidad.
El objetivo del empresario español era lograr que las autoridades catalanas postergaran la moción de censura contra él que, bajo los estatutos del club, debían llevarse a cabo el 1 y 2 de noviembre. Con una carta enviada a la Generalitat él había pedido una prórroga con la excusa de que así podía habilitar varios centros de votación y de esa manera no habría aglomeramiento en las oficinas del Camp Nou, algo que podría traer consecuencias graves en el marco de la pandemia del coronavirus.
Según anticiparon Sport y Mundo Deportivo, la Generalitat no dio lugar a su pedido y de esta manera Bartomeu, acorralado por la presión de los socios que el fin de semana iban a votar por su salida, prefirió dar un paso al costado.
Este lunes, el dirigente había declarado ante los medios: “No he pensado en dimitir. Creo que se está construyendo un buen proyecto y estoy seguro que vamos a ganar más de un título”. Además, agregó: “Sería un mal momento dejar al Barça con una gestora, que no podría tomar decisiones que tomamos nosotros día a día”. Según informó la prensa española, en breve habrá una nueva rueda de prensa en la que Bartomeu explicará por qué ha decidido dejar su cargo.
Bartomeu llegó a la presidencia después de la dimisión por el «Caso Neymar» de Sandro Rosell en enero de 2014 y en 2015, tras su primera temporada completa, adelantó las elecciones un año con el segundo triplete de la historia del club bajo la manga, comenzando así su mandato como presidente electo.
Desde entonces, el dirigente quedó al frente del club y comenzó a protagonizar conflictos de todo aspecto que desembocaron en su salida de este martes. Sin duda, el mayor de sus problemas fue con el capitán e ídolo Lionel Messi.
Tras perder 8 a 2 ante el Bayern Múnich en los cuartos de final de la Champions League 2019/20, el argentino pensó en abandonar al Barcelona y esa decisión la comunicó por un burofax que envió a las oficinas del Camp Nou. Según explicó más adelante, eligió ese método porque no tenía diálogo con Bartomeu, a quien ya le había anticipado su malestar pero nunca fue escuchado por el presidente.
Luego de aquel episodio, Jordi Farré impulsó un proceso para destituir a Bartomeu y el 7 de octubre consiguió las 16.521 firmas que establece el Estatuto de la entidad catalana para iniciar el voto censura. En total, hubo más de 20 mil firmas. En este contexto, el fin de su ciclo era cuestión de tiempo y para evitar ser el primer presidente expulsado de la institución por los aficionados, Bartomeu decidió renunciar.
Ahora, una gestora se hará cargo de Barcelona hasta las elecciones que deben ser antes de que se cumplan tres meses. Carlos Tusquets, un empresario que cuenta con un doctorado en economía de la Universidad de Barcelona que en el ámbito privado se ha destacado en negocios de hostelería (NH hoteles), energía (FERSA, hoy AUDAX) e inmobiliarios (Renta Corporación), entre otras compañías hoy cotizadas en Bolsa, estará al frente del club culé.