Por una hora y media, profesionales del centro de salud Débora Ferrandini intentaron reanimarla, pero la pequeña perdió la vida allí
Una nena de 7 años perdió la vida el pasado viernes. La pequeña fue llevada por sus padres el centro de salud Débora Ferrandini, ubicado en Junín y Provincias Unidas, pegado al Distrito Noroeste esa mañana desvanecida. Pese al esfuerzo de los médicos, perdió la vida en el lugar. En la autopsia se conoció que estaba contagiada de coronavirus.
El trágico hecho tuvo lugar temprano en la mañana del viernes. La familia llegó con urgencia al centro de salud para pedir asistencia para la menor que estaba desvanecida. Según relataron a los médicos, se había ahogado con la comida y el día anterior había presentado dolor estomacal con episodios de diarrea.
Por una hora y media, los profesionales de la salud intentaron reanimarla. Incluso, se hizo presente en el lugar la ambulancia del Hospital de Niños J. Vilela para dar mayor apoyo, pero la pequeña no salió del paro cardiorrespiratorio y perdió la vida. De acuerdo a los datos revelados, era una paciente irregular del centro, el último contacto había sido un año y medio atrás.
La nena no presentaba signos de violencia ni abuso. Además, todo indicaba que se trataba de una muerte súbita o natural, comentaron desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA). Generalmente, en este tipo de casos no se realiza autopsia, pero al tratarse de una menor y al haber fallecido en un centro de salud, se pidió descartar cualquier posibilidad de maltrato.
El MPA reveló que desde el Instituto Médico Legal no se pudo determinar la causa certera de la muerte ni hubo signos que requieran la intervención de la Fiscalía para una investigación penal. Así, el organismo solicitó algunos exámenes complementarios y finalizó su participación en el caso.
Debido al marco de pandemia en el que se vive, desde hace algún tiempo el protocolo indica que se realice el hisopado en las autopsias. Así se supo que la nena dio positivo por coronavirus. Desde la Fiscalía, aclararon que «no todos los fallecimientos son por el virus, más allá que sean positivos».
Luego de que se supiera el resultado, ocho agentes de salud que intervinieron ese fatídico viernes tuvieron que ser aislados. Dos profesionales del centro de salud que lo hicieron sin protección ante la urgencia requerida por el cuadro, los demás utilizaron todos los elementos pero igualmente están aislados por prevención.