Así lo expresó el investigador del Conicet Alejandro Grimson, en una videoconferencia organizada por la Cámara de Senadores
El investigador del Conicet Alejandro Grimson dijo este martes que el «discurso del odio» en la sociedad mantiene las desigualdades sociales y sostuvo que “en ese juego, la democracia siempre pierde”, al participar de una videoconferencia organizada por la Comisión de Sistemas, Medios de Comunicación y Libertad de Expresión de la Cámara de Senadores.
“La pregunta es cómo construir una convivencia democrática en sociedades desiguales. Lo peor que le puede decir uno a otro es “no existís”. Y es lo mismo que mucha gente le dice a otro en este país”, destacó Grimson.
El investigador y antropólogo agregó que “hay una preocupación que surge de un mundo contemporáneo donde crecen los discursos de odio».
«En Argentina hubo fantasías de aniquilación del otro y también genocidios. Hasta que no aplaquemos ese odio, Argentina no va a poder apaciguar su desigualdad”, enfatizó.
Grimson destacó que “la convivencia con alguien que uno odia es imposible” y llamó a “estar preocupados”.
“Tenemos un problema histórico: venimos de una sociedad donde el odio provocó desastres y estamos en un mundo donde el odio está creciendo”, indicó.
No obstante, el antropólogo remarcó que “no necesariamente todas las personas que piensan distinto expresan un discurso de odio”.
Sin embargo, observó que “lo que quiere el odiador o la odiadora es que se le responda con odio” porque “quiere construir un juego de odio, donde la democracia siempre pierde”.
“El desafío es responderle a los odiadores con una épica de la templanza: que haya normativas claras que permitan poner límites más allá del grupo que es objeto de ese odio. Lo peor que nos puede pasar es que cada grupo que es objeto del odio se defienda solo. Debemos instalar una solidaridad que sea la base de una convivencia democrática” sentenció.