Desde la asociación Fijando Miradas llevan adelante una colecta solidaria de calzado para ayudar a las familias que pertenecen a la comunidad Qom de la zona norte de la ciudad
Por Diego Carballido
La asociación Fijando Miradas realiza durante todo el mes de septiembre una colecta solidaria para asistir con todo tipo de calzado a las decenas de familias pertenecientes a la comunidad Qom, que viven en la zona de Almafuerte y Travesía.
Gastón Schiavone es docente de educación física y el presidente de la asociación civil Fijando Miradas. En comunicación con CLG, Schiavone contó detalles acerca de la iniciativa y sobre la tarea social que vienen realizando desde hace nueve años en este barrio ubicado al norte de la ciudad.
«Nuestros objetivo en el barrio es la promoción y prevención de los derechos de los niños y adolescentes. Pero como la pandemia no nos permite desarrollar nuestros talleres, visitamos a los niños y niñas, casa por casa, donde les acercamos un desayuno y alguna actividad para realizar», detalló Schiavone
A partir de ese contacto permanente con las necesidades del barrio fue que surgió la idea de lanzar una colecta solidaria a través de las redes sociales para conseguir todo tipo de calzado, al ver que “muchas familias lo necesitaban”.
«Algunas familias viven en las casas del proyecto Sueños Compartidos, pero hay otras que están en la zona más cerca a la vías, donde son en su mayoría son asentamientos. Este último, es un barrio cercano a un basural donde viven muchos chicos descalzos con el peligro de pisar algún vidrio o cualquier otra cosa. Por eso la importancia de la campaña del calzado», remarcó Schiavone.
Fijando Miradas es una asociación civil conformada por docentes que trabajan en el barrio desde hace casi diez años. «Arrancamos de cero y sin recursos, con el tiempo pudimos hacer la personería jurídica y recién este mes pudimos empezar a trabajar con una psicopedagoga y con alguien que hace la comunicación», detalló Schiavone y agregó: “El objetivo es generar líneas de trabajo que perduren en el tiempo y produzcan, de esa forma, verdaderas modificaciones”.
El referente de Fijando Miradas explicó que antes de la declaración de la pandemia desarrollaban talleres lúdicos deportivos con chicos y adolescentes del barrio y que desde el establecimiento de la cuarentena trabajan “desde otro lugar” principalmente con los jóvenes. “Tratamos de darle otra responsabilidad frente a su comunidad. Es un trabajo que está funcionando muy bien y con el que estamos muy contentos, ya que nosotros solamente realizamos un acompañamiento», explicó Schiavone.
«No dejamos nunca de ir al barrio, pero tuvimos que modificar el modo de trabajo. En todo este tiempo realizamos ya otros pedido de donaciones donde, por suerte, la gente colaboró y contamos con el aporte del Banco de Alimentos Rosario. Pero son los jóvenes los que organizaron las ollas que funcionan de lunes a viernes, además de los desayunos y las meriendas que se distribuyen entre los vecinos. Y desde ellos salió la idea de hacer una campaña para buscar calzado”, contó Schiavone y aclaró que como consecuencia de la pandemia mantienen todos los protocolo de cuidado sanitario. «Estamos en contacto permanente con los centros de salud, tanto provincial como municipal, y extremamos un poco más las medidas a partir de la aparición de algunos casos de Covid”, dijo el presidente de Fijando Miradas y agregó que: «Es bastante complicado porque hay lugares donde no llega muchos recursos, como el agua potable».
«Es una comunidad que resulta difícil que se abra, por eso decidimos seguir trabajando durante estos meses porque lo importante es la referencia. Si no te referencian, en el barrio no se puede hacer nada”, concluyó Schiavone.
