La Justicia vaticana condenó hoy a cinco años de prisión al diplomático Carlo Capella por descargar y distribuir pornografía infantil durante su misión en la Nunciatura Apostólica en Estados Unidos a fines de 2016, informaron fuentes oficiales.
En un rápido proceso de dos días que había iniciado ayer, el Tribunal de la Santa Sede encontró a Capella, de 50 años, culpable de los delitos de posesión e intercambio de material de pornografía infantil, con la circunstancia agravante de la gran cantidad.
Además, la sentencia que se basa en una de las normas impulsadas por el papa Francisco en 2013 para combatir la pedofilia y la pornografía infantil dentro de la estructura vaticana, dispuso una multa de 5.000 euros.
En el primer día de audiencias, Capella había admitido este viernes los «actos compulsivos de consultas impropias en internet», aunque explicó que lo hizo durante una «crisis personal» por su transferencia a Washington.
Según se reveló en la audiencia de ayer, Capella descargó entre 40 y 55 elementos «referidos a menores, entre fotos y videos».
Entre las descargas, había un video en el que aparece un niño muy pequeño «en actitudes sexualmente explícitas», explicó el ingeniero de la Gendarmería vaticana Gianluca Gauzzi este viernes.
El delito que se le imputa a Capella es el de pornografía infantil en los casos particulares previstos y sancionados por los artículos 10 y 11 de la ley No. VIII de 2013 (posesión e intercambio de material de pornografía infantil con el agravante de la gran cantidad).
Según el párrafo 3, la ley prevé prisión de hasta cinco años y una multa de entre 2.500 y 50.000 euros para quien «distribuya, divulgue, transmita, importe, exporte, ofrezca, venda o guarde» material con contenido «de pornografía infantil», o «distribuya o divulgue noticias o información con finalidad de explotación sexual de menores».
El punto 5, en tanto, establece que la pena puede ser superior si el material «es de ingente cantidad».
El diplomático fue capturado en abril tras un pedido de la justicia vaticana en la causa que investiga la posesión de material pornográfico de menores de edad iniciada en 2017.
Capella, oriundo de Milán, aguardó el juicio detenido desde entonces en una celda de la Gendarmería vaticana, mientras se investiga la descarga de material pornográfico entre el 24 y el 27 de diciembre de 2016 durante un viaje del funcionario, entonces destinado en Washington, hacia Canadá.
La denuncia se había iniciado en la ciudad de Windsor, Ontario, donde la policía canadiense determinó que el entonces numero 4 de la diplomacia vaticana en Estados Unidos había subido material pornográfico infantil a un servidor, incurriendo en los delitos de acceso, posesión y distribución de pornografía.