Mientras alimentan a 300 vecinos de Capitán Bermúdez, tratan de finalizar la construcción del espacio, con la intención de que las mamás puedan trabajar y los chicos estar contenidos. Para eso, piden donaciones
Por Gina Verona Muzzio
Los merenderos y comedores son espacios que están cumpliendo un rol clave en medio de la crisis económica y social que genera la pandemia de coronavirus en el país. A muchos de estos además, se les hace cuesta arriba sostener la alimentación de cada vez más cantidad de personas que se acercan a pedir un plato de comida, con la merma en las donaciones y otras imposibilidades que genera la cuarentena. Sin embargo, los voluntarios y emprendedores que llevan adelante los comedores con mucho esfuerzo, no bajan los brazos. Es por eso mismo, que en Capitán Bermúdez el merendero “Somos Futuro” rema contra viento y marea para intentar terminar de construir sus instalaciones.
“Tenemos alrededor de 300 personas que vienen a buscar la comida y la merienda. Antes teníamos 70 chicos y sus familias, que era un cálculo de 150 personas. Ahora es el doble”, contó Daniela Medina, encargada del merendero, a CLG.
Daniela relató también que hace un tiempo vienen ampliando el lugar donde les dan la comida a los chicos. “Ya hicimos las paredes hasta arriba. Tenemos las chapas, tenemos los tirantes, pero nos falta comprar el material para hacer el mojinete y tenemos que comprar unos fierros que van empalmados al tirante, que es de pino fino. Si no está bien empalmado, no va a aguantar”, especificó al respecto.
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Por eso, para intentar terminar de juntar los fondos y no desaprovechar todo lo realizado hasta el momento, desde el merendero abrieron una cuenta bancaria para recibir donaciones. “Se usa solo para el merendero. Juntamos el dinero en la cuenta, buscamos varios corralones, elegimos el más barato, pedimos el número de cuenta y la transferimos. La plata no la toca nadie”, explicó la mujer.
La urgencia, además de la necesidad de alojar a quienes frecuentaban el merendero mientras no estaba dispuesto el aislamiento y a quienes lo harán en el futuro, es preservar los materiales. “Tengo los tirantes afuera de mi casa, si llueve se nos van a arruinar y están re caros para volver a comprarlos”, indicó Daniela.
“Cualquier ayuda, así sea de 50 ó 100 pesos a nosotros nos suma. Todo suma”, agregó.
Pensando en presente y a futuro
Otra de las cuestiones por las que quienes llevan adelante el merendero precisan terminar la construcción es porque presentaron un proyecto a la Municipalidad de Bermúdez. “Es un emprendimiento para las mamás de los nenes del barrio. Pedimos a la Municipalidad que nos done hornos pizzeros, una cocina. Queremos que las mamás puedan trabajar, que hagan pan casero para vender”, comentó Daniela a CLG.
Una pequeña parte de lo que las mujeres ganen con sus ventas quedará en el merendero para poder reponer la materia prima y sostener el emprendimiento en el tiempo, que puedan seguir cocinando. “No queremos estar pidiendo toda la vida”, aseguró Daniela.
La idea de la emprendedora mujer es que “Somos futuro” sea un espacio de contención más amplio de lo que ya es. “Queremos que los chicos vengan a comer acá en varios horarios. Que tengan ayuda escolar, que haya ESI. Tenemos muchas mamás de 14 ó 15 años y queremos tratar de prevenir eso. Que sea un espacio de contención para los chicos y que las mamás puedan trabajar”, concluyó.