Según la empresa ese deficit se debe a la imposibilidad de de trasladar aumentos de costos a precios en su cartera de productos
La alimenticia Molinos sufrió una pérdida de $ 114 millones en el primer trimestre del año, por la «imposibilidad de trasladar aumentos de costos a precios en su cartera de productos». Así lo informó hoy en una presentación ante la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.
Ante ese escenario, y en medio de la pandemia de coronavirus, Molinos dijo que espera «poder adecuar sus precios, al menos parcialmente, al incremento de costos que viene soportando».
La compañía advirtió que hacer ese ajuste es «crítico para equilibrar los resultados».
Esta pérdida trimestral, representa una caída de $1.089 millones en sus resultados respecto del primer trimestre del 2019.
Las pérdidas en el resultado informado se dieron a pesar del crecimiento de volumen de casi 10%, impulsor del incremento en los ingresos operativos que alcanzaron en el período $9.224 millones.
También fueron producto de un 18,2% de baja de gastos centrales, producto de la «continuidad de los programas de eficiencia y productividad».
Los costos por ventas se incrementaron 6,5%, el doble de los ingresos operativos, lo que resultó determinante para el resultado del trimestre.
«Los incrementos de costos no trasladados en su totalidad a precios impactaron en un significativo deterioro de su margen bruto», consignó el informe.
Dijo que la compañía «continuará enfocada en desplegar la fortaleza de sus marcas para potenciar el crecimiento, apoyados en los programas de productividad y modernización implementados en los últimos años».