La entidad califica a la moneda argentina como la más débil del mundo en los últimos dos años
La entidad califica a la moneda argentina como la más débil del mundo en los últimos dos años
El valor del dólar treparía a los 100 pesos para fines de 2020, pronosticó el BNP Paribas. La entidad califica al peso argentino como la moneda más débil del mundo en los últimos dos años.
Según un informe, ahora el valor del peso nacional «no tiene para donde moverse sino a la baja, ya que el país lucha por contener los desenfrenados aumentos de los precios al consumidor».
«Vemos que el peso en algún momento se depreció y se puso al día con un régimen de inflación persistentemente alto», dijo Gabriel Gersztein, director de estrategia global de mercados emergentes de BNP Paribas, con sede en Sao Paulo, Brasil, según informó Bloomberg.
El peso se ha mantenido estable justo por debajo de 60 unidades por dólar en el mercado mayorista desde que el Gobierno recurrió a controles de capital en agosto.
«Este régimen cambiario tiene un costo sustancial para la economía real», agregó.
Gersztein espera que los controles de capital se mantengan fijos, apuesta a que el gobierno eventualmente permitirá que el peso se debilite para mantener constante la diferencia con el llamado contado con liquidación, que actualmente valúa la moneda en 80,4 por dólar.
BNP Paribás espera que el gobierno de Alberto Fernández mantenga los controles de cambios.
Gersztein analiza que ese proceso podría comenzar en marzo o abril.
E indica que que el peso en el mercado mayorista alcanzará los 100 pesos por dólar para fines de 2020, una disminución de 40% de la tasa oficial actual.
El peso fue la moneda de peor desempeño del mundo frente al dólar en términos nominales tanto en 2018 como en 2019.
«Si el nivel del mercado se sobrepasa, la tasa oficial tendrá que ajustarse», dijo.
Gersztein estima que la Argentina tiene sólo 14.000 millones dólares restantes en reservas líquidas netas que podrían usarse para mantenerse al día con la deuda.
La deuda bruta de la Argentina es superior a 300.000 millones dólares, según datos del Gobierno, incluidos los préstamos del Fondo Monetario Internacional y de bonistas privados.