El alcalde de Londres, Sadiq Khan, propuso este viernes prohibir los anuncios de comida con alto contenido de grasa, sal o azúcar en los transportes públicos de la ciudad para combatir la obesidad infantil.
Khan propuso además que se impida la apertura de nuevos establecimientos de comida basura a menos de 400 metros de una escuela.
«La obesidad infantil en Londres es una bomba de relojería y estoy decidido a actuar», explicó.
«Por ello propongo prohibir los anuncios de comida basura perjudicial en toda nuestra red de metro y autobús», añadió.
Casi 40% de los niños de Londres entre 10 y 11 años tiene sobrepeso o son obesos, según datos oficiales.
La Asociación de Publicidad respondió a Khan recordándole que el Reino Unido ya prohíbe anunciar este tipo de comida en medios con una audiencia infantil de más del 25%.
«Prohibir la publicidad tendría apenas impacto en las causas sociales más amplias que impulsan a la obesidad», dijo un portavoz de la asociación a la BBC.