Fue en una audiencia que se desarrolló este miércoles en el Nuevo Centro de Justicia Penal, por el asesinato del personal trainer, ocurrido en julio
Fue en una audiencia que se desarrolló este miércoles en el Nuevo Centro de Justicia Penal, por el asesinato del personal trainer, ocurrido en julio
Esta mañana se desarrolló una nueva audiencia en el marco de la investigación por el crimen del personal trainer Marcos Guenchul (32), ocurrido el 23 de julio pasado en Sucre y Mendoza. Durante la misma se imputó a Maximiliano P., detenido el lunes en Villa Gobernador Gálvez, por “homicidio agravado por el uso de arma de fuego” y quedó en prisión preventiva.
El acusado, de 38 años, está sindicado como el autor material del crimen de Guenchul, asesinado de un tiro cuando salía de trabajar en un gimnasio y fue imputado esta mañana durante una audiencia en el Centro de Justicia Penal.
“Tenemos elementos suficientes para presumir que es el autor material de este hecho, nos basamos en los dichos del coimputado y en la evidencia recolectada en el lugar. En el lugar de los hechos se hallaron cartuchos similares a los secuestrados en el allanamiento en la casa del acusado”, explicó el fiscal Adrián Spelta a los medios, tras la audiencia.
El imputado es el segundo detenido en la causa. Previamente, había sido detenido Caio Santiago S., de 31 años, acusado de ser cómplice del crimen. Este último fue detenido cuando intentaba escapar a Líbano.
Si bien los detenidos son los acusados de haber perpetrado el crimen, la sospecha es que el mismo tiene otros instigadores y que podría estar vinculado a relaciones previas del entrenador.
La pareja del fallecido, quien estuvo presente en la audiencia este miércoles, se refirió a la mediación judicial que Guenchul tenía con su ex novia y madre de su hija, Priscila D. La chica afirmó que no le permitía ver a la nena y que era lo único que la víctima quería. «No pudo tener a su hija en las fiestas. No quería perderse más nada de ella, ni el Día del Padre ni otras cosas. El jueves (25 de julio) tenía que ver a su hija y el martes lo hicieron (el ataque). No lo dejaron llegar a abrazar a su hija. Es el único problema que tenía», aseguró la joven.