La canciller alemana, Angela Merkel, se quejó de la baja proporción de mujeres en las filas parlamentarias de su partido, la Unión Democristiana (CDU). El descenso de la participación femenina en la última legislatura «no es algo para sacar el pecho».
«El quorum no es suficiente para nosotras a día de hoy. El descenso en la proporción de mujeres en el grupo parlamentario de la CDU de un cuarto a un quinto en esta legislatura no es algo para sacar pecho», afirmó Merkel durante un encuentro con la organización femenina Frauen Union, alineada a la formación y que promueve la participación activa de las mujeres en el partido. «Desde hace más de 20 años, la CDU ha estado sujeta a un quorum según el cual en la configuración de listas (electorales), al menos un tercio de todos los cargos deberían estar ocupados por mujeres», recordó la canciller.
«Dado que la CDU tiene muchos mandatos directos, esto no puede ser subsanado a través de las listas», lamentó. Merkel indicó además que la presencia de una mayor proporción de mujeres en las filas de la conservadora CDU es una «cuestión existencial», ya que «sólo así, un partido de masas puede representar a los ciudadanos».
Actualmente, el número de mujeres afiliadas a la CDU representa un 26%, con la Frauen Union, que tiene 110.000 integrantes, como la mayor organización vinculada al partido de la canciller. A lo largo de su carrera, Merkel ha evitado calificarse a sí misma como feminista siempre que se le preguntó al respecto.
Merkel rompió hace casi 13 años la hegemonía de los hombres e impuso un cambio histórico en la vida política alemana al convertirse en la primera mujer al frente del Gobierno. Recientemente también nombró secretaria general de su partido a una mujer, Annegret Kramp-Karrenbauer, a quien muchos ya consideran como su sucesora