Sasha Gigliani tiene 25 años, es futbolista, empleada de un banco, modelo y sueña con ser Miss Mundo. Juega al fútbol desde los 6 años y modela desde los 7. A lo largo de su vida ha recibido tantos elogios como críticas por combinar dos profesiones tan disímiles. Sin embargo, ella ha seguido adelante con sus pasiones y hoy es finalista del renombrado concurso internacional de belleza.
Actualmente, la joven juega en Vélez, donde se destaca como goleadora. «Juego al fútbol desde los seis años porque mi abuelo era director técnico en Saladillo. Les enseñaba a jugar al fútbol a los nenes chiquitos y a mí me gustaba mucho, así que arranqué a jugar en mi pueblo, siempre con hombres, hasta que a los 18 años me vine a Buenos Aires para hacer modelaje», contó Gigliani, quien viste la número 11.
Además, Sasha se inscribió para participar del concurso Miss Mundo. «Sería la primera mujer en la historia mundial de los certámenes de belleza que gana siendo deportista y de un deporte que todos ven como masculino. Yo no lo hago porque me creo linda sino como una herramienta para hacer crecer al fútbol femenino, que es lo que amo», afirmó en declaraciones al diario Olé.
El certamen de Miss Mundo anunciará a su ganadora el próximo 27 de septiembre. La joven argentina considera que tiene muchas posibilidades de ganar, porque detrás de su proyecto y de sus sueños están los de muchas mujeres en todo el globo.