El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue dado hoy de alta y emprendió su regreso a Brasilia, tras haber estado nueve días internado en San Pablo, donde fue operado de una hernia, aunque reasumirá su cargo recién el miércoles.
Bolsonaro había ingresado al hospital paulista Vila Nova Star el 7 de septiembre para ser sometido a la que fue la cuarta operación desde el atentado que sufrió hace poco más de un año, en medio de la campaña electoral, cuando fue atacado con un cuchillo por un hombre con trastornos mentales.
Tras recibir el alta, Bolsonaro continuará en Brasilia con su proceso de recuperación, que incluirá una dieta especial y actividad física bajo la supervisión del equipo del hospital.
Por recomendación médica, recién volverá a la jefatura de Estado pasado mañana, según explicó el vocero de la Presidencia, Otavio do Rego Barros, por lo que hasta ese día seguirá al mando el vicepresidente, Hamilton Mourao.
Bolsonaro mejoró de forma «progresiva» desde que fue operado para corregir una hernia de incisión de siete centímetros de diámetro que le surgió en el abdomen por el debilitamiento muscular provocado por las anteriores operaciones, pero deberá mantener los cuidados, explicó el director médico del hospital, Antonio Antonietto.
El presidente, de 64 años, se recuperará los próximos días en su residencia oficial de Brasilia y tiene previsto viajar el lunes próximo a la Asamblea General de la ONU en Nueva York, donde Brasil realiza tradicionalmente el primer discurso, previsto para un día después.
El mandatario iba a viajar un día antes, el domingo 22, a EEUU, pero su estado físico lo obliga a acortar el viaje, reportaron las agencias EFE y ANSA.
En la ONU, Bolsonaro expondrá sobre la «soberanía de Brasil, de la importancia que le concede a la Amazonia y de otros temas que son equivocadamente divulgados por la prensa extranjera», anticipó el vocero Otavio Rego Barros.
La bronca con cierta parte de la prensa ya había sido expresada en otras oportunidades y Bolsonaro hasta se presentó ante reporteros con tres diarios en la mano a los que acusó de informar mal. Incluso, desde su sala internación aseguró que «parte de la gran prensa es nuestra enemiga» e instó a sus seguidores a «unirse» para enfrentarla.
Tras participar en la Asamblea General, Bolsonaro irá el miércoles próximo a Texas para un encuentro con industriales y empresarios y el mismo día tiene previsto regresar a Brasil.