Carlos Bilardo fue dado de alta este miércoles del Instituto Argentino de Diagnóstico y Tratamiento (IADT) al haber superado un cuadro de gravedad extrema por una enfermedad neurodegenerativa. El entrenador campeón del mundo en México 1986 había ingresado al centro de salud a mediados de julio.
El reconocido DT había sido operado hace cerca de un mes porque tenía sangre y pus en el cerebro, y le colocaron un catéter para drenar esa zona. Además, ya había sido sometido a una intervención parecida dos meses atrás.
Hace más de un año, Bilardo está internado en una clínica especializado por la enfermedad neurológica producto del síndrome de Hakim-Adams. Se trata de la única relacionada con la demencia que puede curarse con una intervención quirúrgica y por eso le habían puesto una válvula para “drenar el líquido del cerebro y dirigirlo hasta la cavidad abdominal, donde se reabsorbe naturalmente”.
Su salud empezó a decaer a principios de 2018 tras ser desvinculado de la radio donde trabajaba desde hacía más de dos décadas. A lo largo de todo su proceso de internación estuvo acompañado por familiares y amigos cercanos, entre ellos algunos del mundo futbolístico.