Luego de casi cuatro décadas de investigación, el conglomerado de salud Johnson & Johnson comenzará una nueva etapa en la que podría llegar a ser la primera vacuna contra el virus del sida. A fin de año, según se prevé, comenzará las pruebas en más de 3.800 hombres en Europa y Estados Unidos. Los científicos buscan dar con una vacuna que funcione en todas las poblaciones alrededor del mundo, especialmente África.
El VIH es un virus que muta con gran rapidez y ataca al sistema inmunitario humano. El director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, Anthony Fauci, fue quien confirmó a la agencia Bloomberg que dentro de poco J&J dará este nuevo paso en la búsqueda de la vacuna. En la iniciativa participa también la HIV Vaccine Trials Networks para hacer las pruebas.
Se estima que un millón de personas en Estados Unidos viven actualmente con el virus y cerca de dos millones en Europa, los dos lugares donde se realizarán los primeros testeos. Si el VIH no se trata convenientemente en una fase temprana, provoca el Sida. La enfermedad es mortal. La vacuna experimental de J&J se basaría en un mosaico de tratamientos de inmunización preventivos que atacan varias cepas del virus.
Como explican los científicos, el virus es muy diverso y por eso insisten en que es importante dar con una vacuna que sea efectiva en múltiples partes del mundo. Los resultados de las pruebas no se esperan, en todo caso, hasta 2023.
La vacuna, por tanto, es un elemento crítico para lograr la erradicación del VIH. Los científicos llevan 15 años trabajando en este cóctel para atacarlo. El principal componente, explica Bloomberg, es un virus alterado de la gripe que produce la proteína que eleva la inmunización. Los participantes en el estudio, añaden, recibirán seis dosis en cuatro sesiones. Dar, sin embargo, con una vacuna universal es un reto. El estudio también debe responder a la durabilidad de la protección.