La policía italiana detuvo esta madrugada a Carola Rackete, la capitana del barco de la ONG alemana Sea Watch, que pasada la madianoche del sábado desembarcó a 40 náufragos en el puerto de Lampedusa sin autorización.
Rackete fue acusada de «resistencia o violencia contra barco de guerra» por la maniobra por la que forzó su entrada en el puerto italiano poniendo en peligro a una embarcación militar italiana, informa el diario La Repubblica.
«Si uno aplasta un bote patrullero de la Guardia de Finanza contra el muelle, es un criminal. Punto. Delincuentes», expresó en twitter el ministro del Interior italiano Matteo Salvini ante la detención de la capitana.
Con su maniobra, para la que invocó «estado de necesidad»; Rackete desoyó las advertencias del gobierno italiano que no autorizó el desembarco de los 40 náufragos que durante 17 días deambularon por aguas del Mediterráneo tras ser socorridos frente a Libia por Sea Watch.
Apenas pisaron tierra pasadas las 2 de la mañana de Italia, los 40 inmigrantes fueron llevados a un centro de primer acogida mientras se decide si logran ser relocalizados en otros países europeos.
Rackete, en tanto, podría ser llevada en las próximas horas a una cárcel en Sicilia, según informa Repubblica. El viernes, la fiscalía de Agrigento, en Sicilia, había iniciado una investigación contra Rackete por violación del artículo 1099 del código de navegación, tras la decisión de la capitana del barco Sea Watch 3 de entrar en aguas italianas pese a la negativa del gobierno de Roma a que ingrese en su territorio.
La Sea Watch 3 deambuló 17 días por el Mediterráneo en busca de un «puerto seguro» para las 53 pesonas que socorrió de un naufragio frente a Libia, de las que el gobierno italiano permitió originalmente desembarcar a 13.
🔵 Statement of our Captain, #CarolaRackete, before entering Port with the #SeaWatch3.
“We are proud of our captain, she did exactly the right thing. She upheld the law of the sea and brought people to safety." – #SeaWatch chairman Johannes Bayer pic.twitter.com/lfZ16Pq9F1
— Sea-Watch International (@seawatch_intl) June 29, 2019
Según el canciller italiano Enzo Moavero, Francia, Alemania, Luxemburgo, Portugal y Finlandia mostraron interés en repartirse a los náufragos si Italia les permite pisar tierra, informó la cadena Rai.