La enorme victoria de Liverpool por la semifinal de Champions League, dejando en el camino nada menos que al Barcelona de Messi, y dando vuelta un 0-3, recorrió el mundo. La hazaña y la manera en que los de Anfield se quedaron con la clasificación causó sensación en el planeta futbolero.
Muchos quedaron boquiabiertos ante el hecho de que el equipo de Messi, claro candidato al título en una competición que no tenía a Real Madrid ni a Cristiano Ronaldo, hoy en Juventus, haya sucumbido de tal manera, cayendo 4 a 0 en un choque definitorio, y con una ventaja tan abultada a su favor.
Según publica el diario Mundo Deportivo, hinchas de Barcelona, enojados por el resultado, increparon al capitán argentino en el aeropuerto de Liverpool. Y el hombre de la selección albiceleste no se quedó callado.
Messi encaró a los que lo insultaban y devolvió gentilezas. Tuvo que ser separado, según indica el periódico español, por un auxiliar del equipo culé. Luego, otros hinchas lo aplaudieron y le manifestaron su cariño.